El sedentarismo y hábitos alimentarios poco saludables pueden afectar más a la vuelta al trabajo / EP

El sedentarismo y hábitos alimentarios poco saludables pueden afectar más a la vuelta al trabajo / EP

Vida

El cóctel 'mortal' de la vuelta al trabajo: sedentarismo y hábitos alimentarios poco saludables

Más de la mitad de los empleados encuestados asegura que pasa la mayor parte del tiempo sentado y, además, tiene hábitos alimentarios poco saludables

10 septiembre, 2020 00:00

La crisis del Covid-19 ha producido en los españoles un efecto indirecto: el aumento de peso. La reclusión, las horas de teletrabajo y las recientes vacaciones de verano han jugado a favor de la báscula. Si a ello se le suma la disminución de la actividad física el resultado es que tres de cada cuatro (76,4%) trabajadores españoles con empleos sedentarios tienen hábitos alimentarios “algo o nada saludables”.

Según un informe de la Sociedad Española para el Estudio de la Obesidad (Seedo), uno de cada dos encuestados (51,7%) asegura que su trabajo es básicamente sedentario y “pasa la mayor parte del tiempo sentado y caminando poco”. De ellos, un 63% afirma que realiza actividad física menos de dos veces a la semana. Por el contrario, el 82,4% de los que definen su trabajo como activo sostienen también que sus hábitos son entre “algo y muy saludables”.

Bodegón de comida rápida en el trabajo / GOOGLE

Bodegón de comida rápida en el trabajo / GOOGLE

Menos movimiento, peor alimentación

“El estudio evidencia que aquellas personas más pasivas y con un estilo de vida más sedentario son las que, además, suelen tener hábitos de alimentación menos saludables y viceversa”, explica el doctor Manuel Gargallo, especialista en endocrinología y nutrición y miembro de la Seedo. El experto añade que “es fundamental” concienciar a la sociedad “sobre la importancia de mantener buenos hábitos nutricionales en el trabajo”, donde los empleados pasan “gran parte” de su día a día.

Según el estudio, casi la mitad de la población (44%) engordó entre uno y tres kilos durante el estado de alarma. “El teletrabajo, el uso de mascarillas y el distanciamiento social son claves para cuidar la salud”, asegura el doctor. Pero recuerda que hay que “tener en cuenta en este regreso al trabajo que las recomendaciones para garantizar la salud nutricional y evitar el sobrepeso siguen invariables”.

El entorno laboral, donde más comemos

La media diaria de horas que cada empleado está en el lugar de trabajo es de ocho y media, y es en este ámbito donde se lleva a cabo gran parte del consumo diario de alimentos y bebidas. Según la encuesta, más de la mitad de los trabajadores consumen café, infusiones o en la oficina o allí donde desempeñen sus labores, y en torno al 30% desayunan, almuerzan y comen en esos mismos emplazamientos. En cuanto a los alimentos más mencionados en la encuesta, están las bebidas citadas, seguidas de la fruta, comida casera, bocadillos, lácteos, frutos secos y comida para llevar de restaurantes. La bebida más elegida es el agua, seguida de café y refrescos.

Los trabajadores comen mal en la oficina / GOOGLE

Los trabajadores comen mal en la oficina / GOOGLE

“Los hábitos que tengamos en el contexto laboral, por lo tanto, serán determinantes para tener un peso adecuado y buena salud a nivel nutricional y general”, puntualiza el doctor Gargallo. Por este motivo, un grupo de expertos de Seedo ha elaborado la guía Recomendaciones para prevenir la obesidad en el ámbito laboral, una lista de sugerencias sencillas y prácticas para evitar esos kilos de más en la vuelta a la oficina y cambiar alguno de los malos hábitos adquiridos.

Agua, movimiento y descanso

Las principales recomendaciones que recoge la guía están relacionadas en gran parte con la actividad física. Desde ir andando al trabajo o hacer parte del recorrido a pie, hasta evitar los ascensores y practicar deporte en el tiempo de ocio. El descanso también es un hábito saludable al que se debe dar importancia, intentando evitar los turnos de noche y durmiendo las horas necesarias.

Tupper saludable / EP

Tupper saludable / EP

En cuanto a la alimentación, la guía recomienda que toda dieta incluya cereales integrales, fruta, verdura y legumbres, priorizando en el almuerzo el consumo de fruta natural, lácteos y frutos secos. También hay que prestar especial atención a mantenerse hidratado, sobre todo cuando se realiza ejercicio físico, y beber entre uno y dos litros de agua al día.

Los beneficios de la cerveza sin alcohol

Aunque los especialistas de Seedo recalcan que el agua ha de ser la fuente de hidratación prioritaria, han incluido la cerveza sin alcohol como una alternativa para consumir en el trabajo durante las comidas. Gracias a su bajo contenido calórico (22 kcal/100 ml), sus ingredientes y su elaboración con base en el proceso de fermentación, es una buena elección frente a otro tipo de bebidas.

Fotografía de producto de cerveza servida fría / GOOGLE

Fotografía de producto de cerveza servida fría / GOOGLE

La bebida está compuesta en un 90% por agua y contiene baja cantidad de sodio. El doctor Gargallo asegura que su composición nutricional es “interesante” y que “tiene efectos positivos en el organismo, ya que regula la flora intestinal y mejora el control de la glucemia”. Y no solo esto: el experto explica que también puede tener “efectos protectores” para prevenir la “degeneración neuronal y el deterioro de las funciones cerebrales”.