Vida

El año del perro de Arantxa, Aniston y Jorge Javier

Comienza la temporada de rupturas sonadas con el ejercicio de estilo de Josep Santacana, que quiere irse a por tabaco con los niños y que pague Sánchez Vicario

18 febrero, 2018 13:02

Cuando la extenista Arantxa Sánchez Vicario puso un océano de por medio para huir de los problemas cometió el error de llevarse puesto uno de sus grandes problemas, el marido y padre de sus dos hijos, a quien la crónica rosa retrata como un presunto tarambana que ha arrasado con todo. Los titulares al respecto son brutales, del tipo que Josep Santacana pide el divorcio, la custodia de los críos, una renta vitalicia y hasta una orden de alejamiento. A bote pronto eso no es una separación, es irse a por tabaco con los gastos pagados, un ejercicio de estilo arriesgado en tiempos de #MeToo.

Se difunde por fuentes interpuestas afectas a Santacana que Sánchez Vicario tendría un carácter más que notable, cosa sabida desde que ganó su primer Roland Garros. En cambio, ¿qué ha ganado Santacana? El caso es que Arantxa se encontró los armarios vacíos de su ático en Miami al regresar de su trabajo de dar clases de tenis a millonarios americanos. Aún tuvo suerte porque podría haberse encontrado una maleta en el rellano y la cerradura cambiada.

Este año chino del perro será el suyo, como el pasado lo fue del cantante Bustamante y Paula Echevarría. El primero no levanta cabeza; ella se ve a solas con el futbolista del Málaga Miguel Torres, un mocetón bien plantado, como corresponde al puesto de zaguero. En España, los ejemplares de defensas centrales son muy apreciados. Ahí están Aitor Ocio, ahora modelo, Sergio Ramos, tan felizmente emparejado con la embarazada Pilar Rubio que va con un sombrero rojo por los estadios o el mismo Piqué de Shakira, que como no ha tenido bastante con cerrar una hamburguesería va a abrir un restaurante en la azotea de un hotel. Caprichos de futbolistas.

Con San Valentín se inaugura la temporada de rupturas sonadas, que alcanza hasta mayo, cuando arranca la de bodas y comuniones. De los Estados Unidos llega noticia de otro gran divorcio, el de la novia de América Jennifer Aniston y Justin Theroux. En el imprescindible TMZ aseguran que no hay constancia documental de que estuvieran formalmente casados, por lo que las cargas administrativas se aventuran livianas, nada que ver con lo de la infortunada Arantxa.

Tampoco hubo burocracia entre Jorge Javier Vázquez y su última pareja, con la que ha roto tan en silencio como convivió. Daba parte él mismo en su blog de Lecturas, en el que glosa las virtudes del apacible estado de la soltería. Para celebrar la libertad, se fue solo a Lisboa y le robaron la cartera. San Valentín, en fin, que lo peor ya ha pasado.