Xavier Sardà, moderador del debate sobre las terrazas, junto a los dirigentes de todos los grupos del Ayuntamiento de Barcelona / CG

Xavier Sardà, moderador del debate sobre las terrazas, junto a los dirigentes de todos los grupos del Ayuntamiento de Barcelona / CG

Vida

Varapalo de los restauradores a todos los grupos del Ayuntamiento de Barcelona

Abuchean al representante del gobierno de Colau, Daniel Mòdol, mientras que los grupos de la oposición proponen acordar alternativas en los próximos 15 días

10 julio, 2017 15:03

Hastío en el sector de los restauradores de Barcelona. Están cansados y disgustados no solo con el equipo de gobierno de Ada Colau, sino con todos los grupos de la oposición que forman el consistorio barcelonés. Así lo han expresado este lunes en el debate sobre terrazas organizado por el Gremio de Restauración y al que han acudido los alcaldables de la oposición y un miembro del gobierno de lo comunes.

Daniel Mòdol, concejal de Arquitectura, Paisaje Urbano y Patrimonio del PSC, ha sido el representante del Ayuntamiento de Barcelona pese a las dudas de la oposición. “Yo no tengo tan claro que esté aquí representado el gobierno actual”, ha dicho el exalcalde Xavier Trias. La gran ausente ha sido la alcaldesa, Ada Colau, invitada al debate formalmente y que el viernes disculpó su ausencia. El mismo día que convocó, casi a la misma hora de este lunes, una rueda de prensa para presentar el Observatorio Metropolitano de la Vivienda en Barcelona.

Indignación general

Unas 250 personas, según el Gremio de Restauradores, han participado en un evento en el que las únicas intervenciones a las que han optado han sido espontáneas, interrumpiendo a los dirigentes allí presentes para increparles sobre su supuesto pasotismo ante la ordenanza actual de las terrazas en la ciudad.

“Nosotros somos responsables de la ordenanza que hay actualmente”, ha asegurado Trias, y ha añadido que, en la política, lo más difícil es la gestión de la complejidad. Y la gestión de la complejidad también es lidiar y dar soluciones para acabar con la indignación del sector hostelero.

Trias ha sido uno de los grandes ovacionados tras sostener que el turismo es importantísimo en Barcelona y que actualmente, de la misma manera que se está creando un ambiente contra él, también se está haciendo contra las terrazas. “Pero no me aplaudáis, que no os va a gustar lo que voy a decir ahora: Las aceras son un espacio público y los bares no tienen derechos sobre los espacios públicos. Es un país de picaresca”. “¡Los políticos sois los primeros!”, ha espetado un asistente al debate.

 

Restauradores protestan contra el supuesto pasotismo de todos los grupos del Ayuntamiento de Barcelona / CG

Medidas concretas

Alfred Bosch (ERC) se ha mostrado defensor de las terrazas (“Esquerra nació en una terraza. ¿Cómo no vamos a ser favorables a ellas?”), y ha lanzado la primera propuesta de medida para desencallar el problema: que las terrazas que no estén atendidas --ha hecho especial hincapié en las de las multinacionales-- y no generen ocupación, no tengan los mismos derechos que las demás.

El presidente del grupo popular, Alberto Fernández, ha pedido a Mòdol que presente ya un texto con preguntas concretas “tipo test, de sí o no” a la oposición para cerrar un acuerdo definitivo con el que avanzar en la normativa y que “esto no se convierta en el debate de la marmota”.

Mòdol, abucheado

Carina Mejías (Ciudadanos) también ha lamentado la ausencia de los comunes (“No hay nadie de ellos porque ellos tienen un modelo de ciudad diferente”), se ha mostrado optimista para alcanzar un acuerdo y ha recriminado que no se permita a los restauradores ocupar las aceras cuando “el top manta sí lo hace”.

Mòdol ha sido abucheado cuando ha asegurado que, en los últimos años, las terrazas “han crecido más que nunca” y ha añadido que “todos somos favorables a ellas”. Tras la presión del Partido Popular para presentar “tres líneas”, ha prometido que este martes hará público un avance en el que, asegura, llevan trabajando meses.

Todos los grupos de la oposición se han mostrado favorables a abandonar el voto crítico si el gobierno de Ada Colau pone de su parte para solucionar el conflicto.