Una mujer embarazada en la playa, el icono de la maternidad /CG

Una mujer embarazada en la playa, el icono de la maternidad /CG

Vida

El retraso de la maternidad consolida el negocio de la fertilidad

Cuando se cumplen 30 años del primer nacimiento con criopreservación en Barcelona, crece la demanda para congelar embriones y óvulos

21 julio, 2017 00:00

Hoy es el 30 cumpleaños de Alejandro, el primer bebé en España —nacido en la clínica Dexeus— gracias a la criopreservación: el embrión estuvo congelado tres meses antes de ser implantado en el útero de la madre. Tras esa primera experiencia exitosa, en Barcelona no ha dejado de crecer la demanda para la congelación de embriones y óvulos, lo que permite postergar la procreación. En paralelo a esos avances ha crecido una próspera industria.

El jefe del Servicio de Medicina Reproductiva de la clínica Dexeus, Buenaventura Coroleu, reflexiona acerca de la importancia de las técnicas de reproducción asistida (y criopreservación), ante la evidente postergación de la maternidad en España. “Es cierto que son un alivio para las mujeres profesionales de estos días. Pero lo que tendríamos que conseguir, en un mundo igualitario, es que la Administración brinde las ayudas necesarias para que las mujeres puedan ejercer su maternidad a la edad biológica adecuada, y no tengan que postergarla por motivos laborales”.

La evolución en la congelación

Coroleu recuerda que en aquella época (en 1987, cuando nació Alejandro), “usábamos una técnica de congelación lenta y había más riesgos para el embrión, pero hoy con la vitrificación se pasa de los 37 grados a los -196 grados de forma ultrarrápida, lo que mejora la supervivencia del embrión que antes era de un 65-75% hasta un 90%”.

La congelación de embriones u óvulos, o criopreservación, es hoy accesible. Una mujer por debajo de los 36 años que tiene ovocitos congelados puede estar tranquila —hasta cierto punto— si quiere postergar su maternidad. En la Dexeus la técnica de criopreservación tiene un coste de 300 euros (para congelar embriones u óvulos), más 300 euros anuales para su mantenimiento.

La edad del embrión

La probabilidad de embarazo la marca el momento en que fueron congelados los embriones. “Si una mujer ha decidido congelar un embrión cuando tenía 34 años, es más probable que pueda quedar embarazada a los 42, en lugar de hacerlo a la misma edad por medios naturales”, explica Coroleu.

ovulos congelados

ovulos congelados

Un empleado de un centro médico abre un dispositivo de almacenaje de óvulos / EFE

En cuanto a los riesgos durante el embarazo, las técnicas de reproducción asistida no afectan. Es decir, si una mujer queda embarazada con 40 años gracias a la fecundación in vitro, no tendrá ni menos ni más riesgos durante la gestación. Aunque sí tendrá más probabilidades de conseguirlo si su embrión es más joven.

Turismo de fertilidad

Josep Barrado, representante de comunicación de Fertilab, Institut Català de Fertilitat y Fertibank, alerta sobre la falta de donantes de óvulos. “Barcelona, como destino turístico de salud que es, tiene también una alta demanda de tratamientos de fertilidad. El problema es que no hay suficiente cantidad de donantes de óvulos para hacer frente a la demanda”, asegura.  

Barcelona es la primera ciudad de Europa a donde acuden las mujeres que demandan tratamientos de fertilidad, según Fertilab, y es por eso que se fomenta la donación de óvulos.

Incentivos para ellas

Aunque el modo de captar donantes es mediante la concienciación y el discurso altruista, también existe una compensación económica. Para los hombres el pago oscila entre los 40 y 60 euros por muestra, mientras que para las mujeres suele ser de entre 900 y 1000 euros, ya que para ellas la extracción es mucho más invasiva.

“La candidata, una vez se incorpora al programa de donantes, sigue unas pautas de medicación, se somete a pruebas genéticas y médicas exhaustivas a las que tiene acceso en forma gratuita”, explica Barrado.

Embarazo a los 40

En la clínica Dexeus reciben cada vez más mujeres mayores de 40 años que quieren quedar embarazadas. Las técnicas son cada vez más eficaces, aunque el riesgo durante la gestación aún no es controlable.

El doctor Coroleu dice que “muchas mujeres que están en torno a la cuarentena vienen a vernos porque quieren ser madres, están fantásticas físicamente porque se cuidan y van al gimnasio cada día, y es ahora cuando pueden permitirse el embarazo”, el problema es que su edad fértil ya ha pasado, y lo más probable es que necesiten un tratamiento.