Furgón de la Guardia Civil que traslada al expresidente del FC Barcelona Sandro Rosell, a su llegada esta mañana la Audiencia Nacional / EFE

Furgón de la Guardia Civil que traslada al expresidente del FC Barcelona Sandro Rosell, a su llegada esta mañana la Audiencia Nacional / EFE

Vida

La fiscalía pide prisión sin fianza para Rosell y su socio

El expresidente del Barça declara durante dos horas en la Audiencia Nacional acusado de blanqueo de capitales

25 mayo, 2017 13:47

Terminó la declaración del expresidente del Barça Sandro Rosell en la Audiencia Nacional por supuesto blanqueo de capitales. El fiscal Vicente González Mora ha solicitado para él prisión sin fianza. También para Joan Besolí, su socio, que igualmente ha respondido ante la juez Carmen Lamela este jueves, 25 de mayo.

Rosell ha declarado durante una hora y media y a puerta cerrada. Ahora es el turno de su mujer, Marta Pineda --que quedó en libertad tras asistir al registro en la lujosa segunda residencia que el matrimonio tiene en Corçà (Girona)--, y de los otros tres acusados por blanqueo de dinero de comisiones ilegales.

Tranquilo

Antes de la comparecencia, el abogado de Rosell ha asegurado que el expresidente del Barça está muy tranquilo y esperando que se aclare todo. Su detención es por un posible delito de blanqueo de 15 millones de dólares procedentes de los derechos de televisión de la selección brasileña a una sociedad con sede en Catar. Lamela decidirá sobre las peticiones de la fiscalía después de los cinco interrogatorios.

La Guardia Civil detuvo a Rosell el martes. Antes de ser trasladado a Madrid para comparecer en la Audiencia Nacional, el expresidente del Barça prestó declaración, asistido por su abogado, durante tres horas ante la Guardia Civil y la Policía Nacional en Barcelona, donde negó haber cometido blanqueo de capitales y aseguró que ganó dinero "lícitamente".

Además de las detenciones, el martes se realizaron numerosos registros en Barcelona, Girona, Lleida y Andorra. En el caso de Rosell, presenció casi diez horas de inspección en su domicilio y luego dos entradas más en la capital catalana.