Un agente de los Mossos d'Esquadra en una imagen de archivo /EFE

Un agente de los Mossos d'Esquadra en una imagen de archivo /EFE

Vida

El origen de los Mossos d’Esquadra

La historia de la policía autonómica de Cataluña se remonta al siglo XVIII tras la Guerra de Sucesión que tuvo lugar en España

29 abril, 2018 14:57

Los Mossos d’Esquadra, la policía autonómica de Cataluña, fueron constituidos en al año 1983 y a día de hoy cuentan con más de 16.000 agentes. No obstante, el origen verdadero de este grupo, cuando eran muchos menos los que conformaban dicha unidad, se remonta muchos años antes. Concretamente al siglo XVIII, cuando fueron fundados por el que fuera Capitán General de Cataluña, Francisco Pío de Saboya y Moura en el año 1719.

Este germen de los Mossos d’Esquadra actuales eran un grupo de guerrillas creadas por Felipe V para enfrentarse a las últimas resistencias del Archiduque Carlos de Austria tras la Guerra de Sucesión, así como a bandoleros locales. Estas Escuadras de Paisanos Armados continuaron operando en diferentes poblaciones de Cataluña a lo largo del siglo XVIII. Su función también abarcaba acabar con la delincuencia local y perseguir a contrabandistas, hombres armados y cazadores furtivos de tierras señoriales.

Mossos d'Esquadra pasando revista en el siglo XVIII /Creative Commons

Mossos d'Esquadra pasando revista en el siglo XVIII /Creative Commons

Mossos d'Esquadra pasando revista en el siglo XVIII /Creative Commons

Abolidas y restauradas varias veces

Ya en el siglo XIX, las Escuadras fueron organizadas con derechos, deberes y castigos y fue reglamentado el uniforme que utilizarían compuesto por el sombrero de copa, la chaqueta característica, alpargatas de cinta azul y esposas de cordón grueso blanco. En 1868 fueron abolidas por el general Prim, ya que eran fieles a la monarquía y serían sustituidas por la Guardia Civil. No obstante, 8 años después, con la restauración borbónica, el grupo volvió a Barcelona y otros municipios, integrado por unos 200 hombres.

Con la dictadura de Primo de Rivera, ya entrados en el siglo XX, el cuerpo se mantuvo y se modificó su uniforme cambiando el sombrero de copa y las alpargatas por la gorra de plato y unos zapatos cómodos, manteniendo las piezas antiguas para ocasiones especiales.

Durante la Segunda República, el cuerpo se mantuvo fiel a a la misma, siguiendo los valores republicanos del nuevo régimen democrático. Tras la detención de Lluís Companys, los mossos fueron desarmados y los líderes encarcelados. En 1939, tras la victoria de Franco y la implantación de la dictadura, el cuerpo fue abolido. No obstante, en 1951, la diputación provincial de Barcelona fue autorizada para crear una sección de Mossos de Esquadra con funciones decorativas para edificios de la diputación. Este grupo estaría integrada por hombres del Ejército, la Guardia Civil y la Policía Armada.

Tras la dictadura de Franco, en 1980, Interior y Defensa cedieron esta unidad a la Generalidat. En 1983, el Parlamento de Cataluña votó para fundar una policía autonómica propia que absorbería a dicha sección y recibiría el nombre de Mossos d'Esquadra. Reformaron el uniforme para hacerlo más operativo y mantuvieron el tradicional como traje de gala pero eliminando los símbolos franquistas. Ya en 1994, la Junta de Seguridad de Cataluña y el Estado llegaron a un acuerdo para desplegar a esta fuerza por toda la comunidad y replegar al resto de cuerpos españoles.