El empresario Jordi Comas / EFE

El empresario Jordi Comas / EFE

Vida

La muerte del empresario Jordi Comas se cierra con una condena de seis años de cárcel… por robo

Los investigadores no pueden acreditar la identidad de las personas que entraron en la casa y acabaron con la vida del entonces presidente de FOEG

10 mayo, 2022 15:18

El caso del óbito del empresario Jordi Comas en 2012 se cierra una década después con una pena de seis años de cárcel para el único acusado de los hechos. Sin embargo, el castigo se corresponde con un delito de robo y no con uno de muerte violenta, dado que los investigadores no han podido acreditar la identidad de las personas que entraron en la casa y acabaron con la vida del entonces presidente de la Federación de Organizaciones Empresariales de Girona (FOEG). En ese asalto, los delincuentes también ataron y golpearon a la esposa del fallecido.

Los hechos ocurrieron el 18 de noviembre del 2012, cuando unos asaltantes entraron en la casa de Comas en Platja d’Aro (Girona). Y, desde entonces, el caso estaba abierto. En 2019, el juzgado de instrucción archivó las actuaciones por el delito de asesinato por falta de pruebas y concluyó que no había quedado “debidamente acreditada” la participación de 13 investigados en este atraco violento, si bien apreció indicios para juzgar a tres sospechosos por el robo y la detención ilegal. No obstante, dos de ellos fueron absueltos hace un año por falta de pruebas y solo uno, Ahmed Kurti, albanés, ha recibido ahora castigo judicial. Está en prisión preventiva desde finales de enero.

Un Audi A3

Fueron las cámaras de Platja d’Aro las que ubicaron a Kurti en los alrededores de la escena del crimen esa noche de 2012. En concreto, captaron el Audi S3 que había robado tres días antes en Sant Cugat del Vallès (Barcelona) con la finalidad de desplazarse hasta la casa de Comas para robar. Y se presentó en el domicilio del empresario sobre las diez de la noche, a pesar de que sabía que los inquilinos estarían despiertos y que sería necesario el uso de fuerza física. De este modo, actuó “conforme a un plan previamente diseñado, bien vigilando los alrededores, forzando o ayudando a forzar una ventana por la que entraron tres personas de identidad no determinada”. Indicios suficientes para el tribunal para condenarlo.

Después del asalto violento, alrededor de las once de la noche, las cámaras captaron el Audi en la A2 en dirección a Barcelona circulando de forma temeraria compatible con una huida precipitada y en su interior, una vez recuperado el vehículo en L’Hospitalet, se hallaron cajitas con joyas sustraídas en el domicilio de Comas, un cigarrillo sin consumir y un guante negro “con ADN compatible sin duda posible con Kurti”. La fiscalía pedía para él 15 años por los dos episodios.