Unas treinta personas han quedado heridas en el accidente de trenes en Vila-seca / EFE - Quique García

Unas treinta personas han quedado heridas en el accidente de trenes en Vila-seca / EFE - Quique García

Vida

El maquinista del tren de Vila-seca avisó de un fallo en los frenos y de que se saltaría un semáforo

El centro de mando que controla la circulación de trenes no llegó a comunicarse con el otro convoy implicado para evitar el accidente

13 junio, 2022 09:05

Un choque entre un tren de mercancías y uno regional ha dejado unas treinta personas heridas. Cinco de ellas, en estado grave. El accidente, que ocurrió cuando faltaban diez minutos para las diez de la noche, se produjo por una avería que impidió que la locomotora de mercancías, operada por Ferrocarrils de la Generalitat de Cataluña (FGC), se parase. Sin embargo, no fue la única causa. El personal de la máquina averiada avisó de que los frenos fallaban y de que se saltaría un semáforo. 

En cambio, el centro de mando que controla la circulación de trenes no llegó a comunicarse con el otro tren implicado para evitar el choque. 

Los maquinistas no se pudieron comunicar

Según explica Rac1, un rato antes del suceso, el maquinista de la locomotora averiada informó al centro de mando de Adif de que la máquina tenía un problema y que no la podía controlar. Y detalló que no podía pararse en la señal en rojo para dejar pasar al tren de pasajeros. La reacción de los responsables de circulación fue intentar contactar con el maquinista del otro convoy para que no siguiese más allá de Vila-seca, pero no fue posible.

Tampoco pudieron reaccionar cambiando la aguja para impedir que el tren sin frenos pasase de su vía a la que estaba ocupada por el regional. La consecuencia fue un choque frontal que acabó con decenas de heridos, cinco de ellos graves. Hoy por hoy, todavía se debe aclarar por qué no se pudo dar esta comunicación y cuál fue la causa del fallo del tren de mercancías, propiedad de Ferrocarriles de la Generalitat de Cataluña (FGC) desde hace unos años, cuando lo compraron de segunda mano a Renfe en 2009. 

El cambio de aguja

Asimismo, el accidente no hubiese sido posible hasta hace dos años, ya que el cambio de vía que envió al tren averiado a la vía ocupada por el regional se instaló hace poco tiempo. Fue en 2020 con la apertura del tramo del Corredor Mediterráneo entre Vila-seca y Vandellós

Así pues, el accidente se podría haber evitado si, en lugar de poner este cambio de aguja, se hubiese puesto un puente o un paso inferior para que los trenes no tengan que circular por vía contraria para entrar al nuevo corredor.