Lloret de Mar cierra la discoteca donde se produjo la paliza al turista italiano

El Ayuntamiento de Lloret de Mar ha decretado el cierre cautelar de la discoteca St Trop'. Allí se produjo la pelea mortal que la madrugada del pasado sábado día 12 de agosto acabó con la vida de un joven turista italiano de 22 años. El consistorio ha detectatado deficiencias en el protocolo de seguridad del club nocturno.

Las cámaras de seguridad del local grabaron el fatídico suceso. Registraron cómo tres jóvenes --ya detenidos-- propinaban puñetazos y patadas a la víctima y que, cuando ya había caído al suelo, le dieron una última parada en la cabeza que lo dejó inconsciente. La víctima falleció ayer en el Hospital Josep Trueta de Girona.

Investigación organizada

Según el alcalde de Lloret, Jaume Dulsat, "tanto los Mossos, como la policía judicial, llevan a cabo la investigación correspondiente al procedimiento penal y el Ayuntamiento de Lloret está trabajando en la vertiente administrativa".

"Esta mañana nos hemos reunido con diferentes técnicos municipales para evaluar el resultado de la investigación y se ha podido determinar que existen motivos suficientes que amparan el cierre cautelar del establecimiento", ha asegurado Dulsat.

Deficiencias en la seguridad

Las deficiencias detectadas se refieren tanto a la seguridad privada de la que debería disponer el establecimiento como a determinada documentación en materia de seguridad, con la que necesariamente deben contar los establecimientos de pública concurrencia. "Cada año requerimos a los establecimientos de ocio nocturno que firmen una declaración responsable sobre el cumplimiento de toda la normativa de aplicación. Hemos comprobado que este local manifestó que cumplía todos los requisitos que establece la ley y ahora hemos comprobado que presuntamente no es así", ha espetado el alcalde.

Los detenidos por esta agresión tienen 20, 24 y 26 años, son de nacionalidad rusa, originarios de Chechenia y residentes en Francia, donde habían pedido asilo político. Según las investigaciones de los Mossos, no conocían a la víctima, a la que apalearon tras sufrir un simple empujón.