Un presunto ladrón murió en Lleida el domingo, 21 de mayo, a causa de los disparos que le efectuaron los mossos d'esquadra mientras huía. La víctima había atracado una gasolinera por la tarde junto a otro hombre armado con un destornillador. Después, se dio a la fuga en una furgoneta y a pie, antes de ser abatido.
La Policía autonómica ha indicado que los agentes persiguieron a la pareja, que se había adentrado en el barrio de La Bordeta de la capital de provincia, y que efectuaron "disparos intimidatorios", no sin antes darles el alto en repetidas ocasiones.
Caja registradora
El presunto atracador, junto a su cómplice, había intimidado a un trabajador de la estación de servicio con la herramienta. Ambos consiguieron llevarse la caja registradora y huir en una furgoneta.
La pareja se dirigió al barrio de La Bordeta seguida de cerca por patrullas de mossos. El vehículo salió de la vía, y los supuestos delincuentes continuaron su fuga a pie.
Fue entonces cuando los agentes les dieron el alto y dispararon sus armas reglamentarias, abatiendo a uno de los presuntos criminales.
"Un detenido y una víctima mortal"
"En el transcurso de este operativo policial para detener a los presuntos ladrones, uno de ellos resultó herido mortalmente por arma de fuego, y el otro detenido", han señalado los Mossos en un comunicado.
Tras el suceso, el Área de Investigación Criminal de la Región Policial Ponent ha tomado las riendas de la investigación.