Cirujanos expertos de la Fundación Barraquer inician una de las últimas fases experimentales / BARRAQUER

Cirujanos expertos de la Fundación Barraquer inician una de las últimas fases experimentales / BARRAQUER

Vida

El implante de retinas de grafeno da esperanzas de revertir la ceguera

La Fundación Barraquer lidera un proyecto internacional que podría suponer una auténtica revolución en el ámbito de la oftalmología

2 diciembre, 2020 19:26

La Fundación Barraquer de Barcelona lidera un proyecto pionero en el que participa, entre otros, el Instituto de la Visión de París, para implantar una nueva retina artificial hecha de grafeno, que abre las puertas a devolver la visión a personas con ceguera. En el proyecto participan también el Instituto Catalán de Nanociencia y Nanotecnología (ICN2), el Instituto de Ciencias Fotónicas (ICFO) y el Instituto de Física de Altas Energías (IFAE).

Según los oftalmólogos de la Barraquer, la aplicación de esta nueva técnica, que acaba de iniciar una de las últimas fases experimentales antes de aplicarse en humanos podría suponer una revolución en el ámbito de la oftalmología, gracias al uso del grafeno, una sustancia transparente compuesta por carbono puro, con átomos organizados en un patrón regular hexagonal y parecido al grafito que goza de alta conductividad y es muy flexible y ligero.

Cinco años de trabajo

El objetivo del proyecto, denominado i-VISION (Adaptive Retinal Implant Technology for Vision Restoration) y que se inició en 2015, es desarrollar una tecnología de prótesis de retina capaz de ofrecer una alta agudeza visual a personas ciegas que sufren enfermedades de la capa externa de la retina, como la retinosis pigmentaria, la degeneración macular asociada a la edad o la enfermedad de Stargardt, entre otras. En España actualmente hay más de 15.000 personas afectadas de retinosis pigmentaria y otras 700.000 personas con degeneración macular asociada a la edad. Pese a que en ambos casos las células fotorreceptoras --encargadas de convertir la luz en impulsos nerviosos que luego el cerebro transforma en imágenes-- dejan de funcionar, las neuronas que mandan la información al cerebro se mantienen intactas.

Según ha explicado el subdirector médico y coordinador del área de Retina y vítreo del Centro de Oftalmología Barraquer, Jeroni Nadal, la aplicación de prótesis de retina procesa imágenes del exterior a través de una cámara que se encarga de estimular estas neuronas mediante unos electrodos para recrear la visión. "Con las técnicas utilizadas hasta el momento, la capacidad de restaurar la visión es bastante limitada, pero con el uso del grafeno las expectativas cambian completamente", ha añadido.

Experimentación en animales

El nuevo dispositivo consiste en implantar en la parte interna de la retina un electroestimulador con miles de estimuladores, que se encargan de sortear el defecto en la retina externa que tienen las personas con retinosis pigmentaria y degeneración de la mácula y que causa su ceguera.

A diferencia de otros materiales, con los que lo máximo que se conseguía es que el paciente pudiera llegar a ver sombras, el grafeno "supone un gran avance en visión artificial, ya que logra una mayor estimulación de la retina y permite identificar y discriminar mejor las imágenes, con lo que, en el futuro, la persona ganaría en autonomía", ha afirmado Nadal. Tras finalizar el diseño del implante, un equipo de cirujanos del Centro de Oftalmología Barraquer, dirigidos por Nadal, acaba de iniciar la fase de experimentación en animales.

En dos años, en humanos

El doctor Jeroni Nadal y otros investigadores de la Universidad de la Sorbona tienen previsto hacer posible su aplicación quirúrgica en el cuerpo humano dentro de dos años. "Una vez finalizada, el siguiente paso será validar el aparato con más experimentos en el Instituto de la Visión de París para acabar de perfilar hasta el último detalle la tecnología. Con todo, se estima que la prótesis esté lista para ser utilizada por las primeras personas enfermas dentro de unos dos años", ha explicado.

El oftalmólogo ha resaltado que los resultados obtenidos hasta el momento son fruto de muchos años de investigación y de la colaboración de científicos de distintos centros punteros, entre ellos los expertos en nanomateriales, electrónica y microscopía del ICN2, del ICFO y del IFAE, tres centros de investigación punteros pertenecientes al Instituto de Ciencia y Tecnología de Barcelona (BIST).