Los 2.750 empleados de Can Ruti denuncian que trabajan al limite

Los 2.750 empleados de Can Ruti denuncian que trabajan "al limite"

Vida

Hospital de Badalona: los médicos se van "llorando" por el colapso de las urgencias

Un jefe de guardia de Can Ruti sufrió un infarto el año pasado en pleno pico de pacientes

19 enero, 2016 13:44

Los trabajadores del hospital Germans Trias i Pujol de Badalona, más conocido como Can Ruti, se marchan "llorando" a casa algunos días por el colapso de las urgencias. Un jefe de la guardia médica del centro sufrió un infarto en pleno pico de pacientes el año pasado. El profesional fue localizado a tiempo y pudo ser reanimado por sus compañeros.

Según ha confirmado un portavoz del hospital a Crónica Global, el incidente coincidió con un pico en la avalancha de pacientes en febrero de 2015. No obstante, la misma fuente asegura que el médico afectado no considera que se tratara de "una situación extraordinaria", y añade que a raíz del caso "se le detectó una cardiopatía de base".

Estrés continuo

Los trabajadores aportan otra versión. "No sabemos si el infarto fue por estrés, pero la plantilla sufre cargas de trabajo insoportables y hay días en que nos vamos llorando", se queja un portavoz del sindicato Catac, segunda fuerza en el centro.

Can Ruti funcionaría "con recursos justísimos", lo que añade presión a los jefes de guardia médica, como el que sufrió la insuficiencia cardíaca. "Abren y cierran la quinta planta del hospital para drenar las urgencias. Aún así, algunos días doblamos los pacientes en los 68 boxes que tenemos".

Carga de trabajo

Otras fuentes sindicales aseguran "desconocer" el incidente del jefe de guardia, pero confirman la presión. "La situación es insoportable. Es cierto que Can Ruti ha estabilizado plantilla, pero la cuestión de la carga laboral que soportamos es recurrente", abundan.

Cabe recordar que el hospital Germans Trias i Pujol recibió un premio de la consultora iAsist en noviembre como uno de los que mejor gestiona sus recursos en España. La misiva, firmada por el entonces consejero de Salud, Boi Ruiz, encendió a los sindicatos, que llevan tiempo pidiendo más medios y personal.

Hace pocos días, la Vall d'Hebron, el mayor hospital de Cataluña, tuvo que reclamar que dejaran de enviarle pacientes de urgencias porque el servicio estaba colapsado. La epidemia de gripe anual aún no ha empezado.