Carlos, operario de la mina en la que este jueves ha colapsado una galería / LUIS MIGUEL AÑÓN - CRÓNICA GLOBAL

Carlos, operario de la mina en la que este jueves ha colapsado una galería / LUIS MIGUEL AÑÓN - CRÓNICA GLOBAL

Vida

Habla uno de los operarios de la mina de Súria: “Los cambios de temperatura son fatales”

Los geólogos analizaban la galería del minador 30 a primera hora de la mañana, donde esta noche se han conectado dos túneles, cuando el techo se desprendió

9 marzo, 2023 16:20

“Los cambios de temperatura son fatales, porque las capas se desestabilizan”, explica Carlos, uno de los operarios de la mina que opera Iberpotash en Súria, de ICL, a las puertas del complejo en el que este jueves los servicios de emergencia tratan de llegar hasta el punto en el que tres trabajadores quedaron sepultados, a 900 metros de profundidad. El fatal accidente se produjo minutos antes de las nueve de la mañana cuando Carlos, que trabaja de noche, ya había terminado su turno. "Por la mañana aquí hay mucha gente, unas 250 personas", señala, por lo que la desgracia podría haber sido todavía mayor. 

El operario relata que se enteró de lo ocurrido por el grupo de Whatsapp que tiene con sus compañeros de trabajo. Al conocer la gravedad de los hechos no dudó en acercarse de nuevo al complejo para echar una mano en el rescate. Allí ha explicado que esta mañana, como cualquier otra, los geólogos inspeccionaban las galerías. Ellos son quienes les indican por dónde deben seguir las excavaciones y qué capas son las más ricas en potasa. Cuando llegan los ingenieros a bordo de su Jeep los operarios paran los “minadores”, inmensas máquinas de 100 toneladas de peso cada una que, mediante dos cabezas, van horadando las galerías para extraer la potasa. "Producen mucho polvo", así que hay que pararlas para que los expertos analicen las paredes y señalen las grietas. 

Los bomberos de la Generalitat trabajan en la mina de Súria / LUIS MIGUEL AÑÓN (CG)

Los bomberos de la Generalitat trabajan en la mina de Súria / LUIS MIGUEL AÑÓN (CG)

Galerías a 1.000 metros de profundidad

Este jueves, en el minador 30 de la zona sur de la mina de Cabanasses, donde han sucedido los hechos, la máquina estaba parada. “Estaba retirada, en una zona segura”, ha relatado Carlos, precisamente porque en esa zona por la noche se habían hecho labores de excavación para conectar dos galerías perpendiculares. “Seguramente las paredes o el techo no eran estables y ha colapsado”, ha apuntado. “Lo que han hecho es lo que está previsto”, ha relatado, descartando una posible imprudencia. 

Según el operario, que cuenta con años de experiencia en el sector, los cambios bruscos de temperatura son traicioneros y, a veces, provocan la aparición de grietas, que a las profundidades a las que trabajan son fatales. Aún así, el accidente no se ha registrado a la profundidad máxima a la que operan, dado que han llegado a realizar perforaciones a 1.000 metros de profundidad, siguiendo las indicaciones de los ingenieros. Ellos son quienes realizan “sondeos” por los que se guían los mineros para acceder a las mejores capas para extraer la potasa y descartar la sal, que carece de valor. 

Los servicios de emergencia trabajan en el accidente en la mina de Súria / LUIS MIGUEL AÑÓN (CG)

Los servicios de emergencia trabajan en el accidente en la mina de Súria / LUIS MIGUEL AÑÓN (CG)

Difícil rescate

Cuando se produce un incidente, explica el operario, en las galerías existen “botones de pánico” que alertan al centro de control de que algo no va bien. “Un pequeño incendio, por ejemplo, es terrible bajo tierra porque el humo se expande por las galerías”. Cuando la alarma suena, se desaloja la mina. Hoy, probablemente alguien apretó uno de estos botones o desde el control detectaron que los afectados no respondían a los receptores que llevan encima para comunicarse. “Eso o que los localizara un vigilante”, añade. 

Tras tener conocimiento de los hechos, hasta el lugar se desplazó la propia ambulancia de la mina y el coche de intervención, que se encontraron con el colapso y no pudieron socorrer a los tres operarios atrapados. Desde ese momento, en la zona trabajan 11 dotaciones de los Bomberos de la Generalitat, los Mossos d'Esquadra, que han desplegado a las unidades de subsuelo, canina y de montaña, así como el Sistema de Emergencias Médicas (SEM). Por el momento, como ha confirmado el conseller de Interior, Joan Ignasi Elena, los rescatistas todavía no han podido acceder al lugar. Se prevé que los equipos tarden varias horas en asegurar las paredes de las galerías para extraer los cuerpos con seguridad.