La familia real emiratí se refugia en el Hotel Mandarin Oriental

Un grupo de miembros de la familia real emiratí ha elegido Barcelona para pasar unos días de asueto. En concreto, varios altos nombres de una de las seis familias reales de los Emiratos Árabes Unidos, aunque no directos en la línea sucesoria, han elegido el exclusivo Hotel Mandarin Oriental para hospedarse durante varios días, coincidiendo con la festividad de La Mercè.

Directivos del sector de la hotelería de lujo aseguran que al menos tres mujeres de la familia real --y su séquito-- se han trasladado hasta el corazón de Barcelona en una escapada de “compras, paseos y cultura”. Por eso, han elegido el Mandarin, emplazado en pleno paseo de Gràcia y a escasos metros de las boutiques de moda más exclusivas de la ciudad.

"Es habitual por motivos médicos"

Otras fuentes del sector alojativo del más alto nivel han precisado que la presencia de la segunda corona de la familia real emiratí en Barcelona "es curiosa, pero no sorprendente", pues se trata de un cliente que acude "con relativa asiduidad por, sobre todo, someterse a tratamientos sanitarios en los hospitales de más nivel de la ciudad". 

"Son parte de la Casa Real de EAU, aunque no los directamente situados en la línea sucesoria. Por su condición de nobleza, la factura del hotel la paga la embajada de Emiratos Árabes Unidos en Madrid", detalla un director de hotel situado, también, en la milla de oro de Barcelona. 

Limusinas y escoltas frente a la puerta

Este medio ha podido comprobar cómo las limusinas que transportan a los poderosos nobles se arremolinan ante la puerta del Mandarin, que en el pasado albergó el Banco Hispano Americano en la capital catalana. Ni chóferes ni tampoco la seguridad privada que los escolta han dado detalles sobre los vip a los que transportan o protegen, aunque su presencia ya genera expectación entre los viandantes. 

Vehículo de altas prestaciones frente al hotel Mandarin Oriental / LUIS MIGUEL (CG)

Preguntada oficialmente por la cuestión, una portavoz de la cadena hongkonesa en Barcelona ha recordado que no podría dar información de ningún cliente, pues rigen las políticas de confidencialidad con todos los huéspedes, sin excepción. Otras voces del sector hotelero sí han destacado que la familia se mueve "con tres coches, uno de ellos dedicado a la necesaria seguridad que llevan huéspedes de este rango". 

Pedralbes, también

Sea como fuere, la presencia de parte de la familia real emiratí --de una de las seis casas que forman la múltiple jefatura de Estado de la federación de monarquías-- no es nueva. Otra alto representante de un país del Golfo pasa los veranos en el barrio de Pedralbes de Barcelona, donde tiene casa propia. 

En este caso, la también celebrity, desconocida en la capital catalana por la discreción que opera en todo momento en las seis casas regentes de EAU, mantiene su villa con personal propio y la utiliza apenas algunos días al año. Ello sin contar el tráfico de directivos y turistas de alto nivel que utilizan las dos aerolíneas de Emiratos que operan en la capital catalana: Emirates y Etihad. 

Logo del Mandarin Oriental / LUIS MIGUEL (CG)

La catarí sufrió un robo en 2019

Desde otro Estado del Golfo, Catar, acudieron miembros de la Familia Real a Barcelona. Fue en 2019, cuando los nobles sufrieron un robo en una habitación del hotel Monument situado en, también, el Paseo de Gràcia, como avanzó La Vanguardia. 

En aquella ocasión, los mandatarios cataríes vieron cómo individuos desconocidos se llevaban 30.000 euros en joyas y dinero que se encontraban en la caja fuerte del alojamiento, que pertenece a la cartera de la familia relojera Cadarso. 

'Suites' de hasta 12.000 euros

En efecto, sea este cinco estrellas o el propio Mandarin, los turistas de mucho nivel optan por las suites, como las situadas en la parte superior de la joya ubicada en el número 38 de Paseo de Gràcia. De hecho, este complejo fue elegido por los World’s Best Awards como el mejor de la Ciudad Condal en 2019.

Imagen de una de las suites del hotel Mandarin Oriental de Barcelona / CG

Aunque el precio aproximado de sus habitaciones ronda los 600 euros, las exclusivas suites alcanzan los 12.000 euros la noche. Entre las comodidades que ofrecen estas últimas destacan un mayordomo disponible las 24 horas del día, amplias salas de estar, duchas con efecto de lluvia tropical, cocina privada y amplios comedores, tocador para los invitados, vestidor y terraza con vistas al skyline de Barcelona. Entre los amenities también figuran, según la web, albornoces de rizo afelpado y lujosas ropas de cama de plumón de ganso.

Además de las comodidades de las habitaciones, el hotel ofrece una experiencia gastronómica exclusiva de la mano de la chef Carme Ruscalleda, una terraza con piscina exterior y otra climatizada, un spa de lujo y un completo gimnasio.