Una inspección en Merca Zaragoza detecta una red de explotación laboral entre pakistaníes

Una inspección en Merca Zaragoza detecta una red de explotación laboral entre pakistaníes

Vida

Explotación en Zaragoza: 17 horas de trabajo y una comida

La Policía desarticula una red de fruteros pakistaníes que sometía a compatriotas a jornadas de semiesclavitud

20 abril, 2019 13:28

Catorce horas de trabajo y una comida diaria. En estas condiciones laborales trataban a sus compatriotas una red de fruteros pakistaníes, que ha sido desarticulada por la Policía Nacional en Zaragoza.

Las investigaciones para la desarticulación de esta organización criminal comenzaron en mayo de 2018, cuando a partir de las denuncias de otros fruteros se detectó la presencia de un inmigrante paquistaní en una frutería sin permiso de residencia ni de trabajo.

El cabecilla, arrestado tras llegar de Pakistán

El principal de los investigados, que se hallaba en Pakistán durante la ejecución de la operación policial, fue detenido el martes pasado en el momento de llegar de su país, por lo que el número de arrestados en las dos fases del operativo asciende a ocho personas.

Los detenidos, de los que tres son de una misma familia y habían regentado negocios similares en Benidorm (Alicante), fueron puestos a disposición judicial, seis de ellos por presuntos delitos de trata de seres humanos y contra los derechos de los trabajadores y dos por infracción a la Ley de Extranjería

Ilegales de madrugada en Merca Zaragoza

Tras las primeras pesquisas, que se saldaron con la detención de dos empresarios paquistaníes, las investigaciones culminaron el pasado mes de enero, al detectarse a varios inmigrantes en situación ilegal trabajando de madrugada en Merca Zaragoza en labores de carga y descarga de camiones de fruta.

La fruta estaba destinada a nueve fruterías propiedad de empresarios paquistaníes que se servían de mano de obra ilegal procedente de su propio país.

Falsas promesas de trabajo en España

Las labores de vigilancia llevadas a cabo permitieron constatar la presencia de cuatro trabajadores en explotación que habían sido captados en su país de origen con la falsa promesa de un trabajo legal en España y de permiso de residencia.

Las fuentes citadas señalan que para eludir controles policiales, los inmigrantes eran obligados a atravesar a pie por zonas fronterizas no vigiladas entre Pakistán, Irán, Turquía, Grecia, Albania, Montenegro, Bosnia, Croacia, Eslovenia e Italia, desde donde eran conducidos finalmente hasta España.

Abono de 8.000 euros a la red

Una vez en España, viaje por el que debían abonar a la red 8.000 euros, eran trasladados a Zaragoza, empadronados y hacinados en dos pisos de la misma organización en los que debían compartir un mismo camastro dos personas.

Según las referidas fuentes, los miembros de la red no dudaban en agredir, amenazar y coaccionar a sus compatriotas para conseguir su objetivo final, su explotación laboral en fruterías de la capital aragonesa en las que trabajaban sin sueldo ni contrato, y sin días de descanso ni vacaciones.

De 4 de la madrugda a 9 de la noche

Las jornadas laborales de estos inmigrantes se extendían durante 17 horas, desde las 04.20 de la madrugada hasta las 21.00 horas de la jornada, con una única comida diaria para alimentarse.

Las investigaciones culminaron este mes de abril con la entrada, junto a las inspecciones de Trabajo y Seguridad Social, en las frutería vigiladas, la detención de sus cuatro responsables por presuntos delitos de trata de seres humanos y otros afines y la liberación de los cuatro inmigrantes que trabajaban en dichos establecimientos.