Vida

El pacto del cocido de Lhardy y la semana negra de Mas

El núcleo duro del Tribunal Constitucional se cargó la ley catalana de consultas en una cuchipanda a base de cocidito madrileño, según José María Brunet en La Vanguardia. Más palos a Mas y la suspensión de Vidal.

27 febrero, 2015 09:42

El plato estrella del restaurente Lhardy es el cocido madrileño, también dicho de tres vuelcos. Cuesta 35,50 euros. Pocas especialidades del antiquísimo (1839) establecimiento bajan de los treinta euros, pero es que la carta es un homenaje a la cocina. Nada de chichivainas con mojote de alipollo. Allí disponen de los hígados más grasos y cirróticos de las ocas del Manzanares, así como un gamo a la austriaca y un pato asilvestrado al perfume de naranja cuyas carnes son tan tiernas como la yema de un huevo de ternero.

Se sabe que es un gran restaurante porque los inspectores de la Michelín tienen prohibido el paso, feliz circunstancia que ha preservado el encanto decadente del local y sus fogones. Es uno de los preferidos de Unió para agasajar a la prensa madrileña, que no se conforma con menos aunque muerda la mano que firma la cuenta. Total que en Lhardy se cuece de todo, como explica José María Brunet en la crónica de La Vanguardia sobre la reunión clave del Tribunal Constitucional en torno a la ley catalana de cultivos y consultas. Informa Brunet: "La mañana del pasado 10 de febrero, los camareros del restaurante Lhardy, uno de los de mayor fama y tradición de Madrid, citado por Galdós y Azorín, preparaban una mesa para cuatro en uno de los rincones discretos del establecimiento. La reserva la hizo el presidente del TC, Francisco Pérez de los Cobos, que no eligió el sitio al azar, ni sólo por sus propiedades gastronómicas. El almuerzo era importante porque unos días antes los magistrados Pedro González-Trevijano y Juan Antonio Xiol, ponentes de las sentencias sobre la ley de Consultas y el decreto de convocatoria del 9-N, le habían comunicado a De los Cobos que no estaban consiguiendo deshacer la madeja, que creían que ya no se iban a poner de acuerdo. A De los Cobos le dio un dolor de muelas".

Sigue la crónica: "De los Cobos tenía confianza plena en Xiol y Trevijano. Creía que si ellos no eran capaces de sacar el crucigrama, no lo sería nadie. Y, además, quería a los dos magistrados catalanes del TC -Xiol y Encarna Roca- con la sentencia que se dictara, no haciendo votos particulares para discrepar del resto de sus colegas. Xiol estaba en contacto con Encarna Roca, que compartía sus reservas sobre las propuestas de sentencia de Trevijano. De los Cobos sabía de esa conexión -y lo prefería, por tenerles juntos-, de modo que cuando convocó a Xiol al almuerzo del Lhardy no le sorprendió ni le desagradó que el magistrado le preguntara: -Presidente, ¿qué te parece si invitamos a Encarna? -Claro, claro, Juan Antonio, no faltaba más- y sonrió por lo bajo".

La comida acabó por todo lo alto, con una estocada atravesada pero eficaz. Hasta Encarna Roca, vocal del TC a propuesta de CiU, votó con el resto de magistrados. Brunet explica que De los Cobos utilizó el recurso de ponderar la "pilota" catalana frente al chorizo madrileño (en materia de cocidos, se entiende) y el argumento causó un gran impacto emocional. En un momento dado, cuando las negociaciones estaban en un punto muerto, dijo el presidente del TC: "Está muy bien este cocido. (El de Lhardy tiene justo prestigio.) Pero, ah, la escudella, la pilota de la escudella, qué delicia". Y los garbanzos, don Francisco. Pero lo mejor, sin duda, el tuétano servido en una tostada y sin más aderezo que unas lascas de sal. Es para volverse vaca.

Veníamos de la mano de leches y el aviso de Jordi Júnior, eso del "Mas es mi amigo" que algunos diputados jocosos de Convergència han convertido en politono, de modo que cuando les suena el teléfono móvil se acuerdan de la estirpe de los Pujol. Pasamos por la unánime sentencia del TC y nos dirigimos al tercer leñazo que le han dado a Mas este semana. "El TC catalán", según El Periódico, es el "Consejo de Garantías Estatutarias", órgano consultivo de la Generalidad que ha tumbado las adendas a los presupuestos introducidas en el acompañamiento. María Jesús Cañizares lo cuenta en el Abc: "Nuevo varapalo al proceso secesionista de Artur Mas. Un día después de que el Tribunal Constitucional (TC) tumbara la ley de consultas y el decreto de convocatoria del 9-N, el Consejo de Garantías Estatutarias (CGE) de la Generalitat emite un dictamen en el que rechaza las «estructuras de estado» que el Gobierno catalán quiere crear de cara a una virtual independencia de Cataluña".

Continúa Cañizares: "Este órgano, encargado de velar por el ajuste de las leyes catalanas al Estatuto de Autonomía y la Constitución, niega a la Generalitat su pretensión de constituir una hacienda propia que gestione todos los tributos, propios y estatales, y de crear una Agencia Catalana de Seguridad Social. También rechaza los preparativos para asumir la seguridad de las infraestructuras básicas -nucleares, transporte, luz...-, así como la pretensión del Ejecutivo de Mas de hacer un inventario del patrimonio nacional en Cataluña con la finalidad, tal como avanzó ABC, de proceder a un reparto equitativo como establece la Convención de Viena.(...) El dictamen añade que el legislador catalán «no puede requerir al Gobierno para que, en el actual marco constitucional y estatutario, elabore un proyecto de ley» sobre seguridad pública» que ponga en manos de los Mossos d’Esquadra el control de las infraestructuras estratégicas de Cataluña, pues se trata de una «competencia exclusiva del Estado»".

En este consejo está, por ejemplo, el exdirigente de ERC Joan Ridao, quien tuvo los mismos reparos que Encarna Roca en lo de votar con la mayoría: ninguno. No es que Roca y Ridao dispongan de un voto de calidad que haga de su juicio la prueba del nueve de la bondad de fallos y dictámenes. Es que las leyes de Mas y Junqueras tienen menos enjundia que la producción del juzgado de paz de Alpedrete. Así pues, el proceso, por la vía jurídica, se va a cascarla a Parla (de donde fue alcalde Tomás Gómez, el defenestrado, y donde, según El País, se han pasado 42 millones con el tranvía).

Francesc de Carreras aportaba ayer en El País claves a paletadas sobre las "estructuras de Estado. Escribió el profesor: "Dicho así parece muy sencillo de entender pero mi perplejidad inicial provenía de una cuestión semántica. En sentido amplio, en uno de los sentidos en los que la Constitución lo emplea, la Generalitat ya es Estado y así lo reconoció el TC en una de sus primeras sentencias. Es sabido que el término constitucional de Estado es anfibológico y en la Constitución se emplea en dos sentidos: por un lado significa “poder público” (en este caso son también Estado las comunidades autónomas y los entes locales) y, por otro, equivale a instituciones centrales del Estado o Estado central".

Prosigue el texto: "Así pues, en Cataluña, o las estructuras de Estado ya estaban creadas o la Generalitat, por carecer de competencias para ello, no podía crearlas. En sí misma, toda la Generalitat es una estructura de Estado. ¡Y vaya estructura! Ciento veinte mil funcionarios, 37.000 millones de euros anuales. ¡Pedazo de estructura! Naturalmente, la Generalitat tiene potestad para autoorganizarse y continuamente así lo hace. Pero esto, normal en toda organización pública o privada, es muy distinto a crear estructuras de Estado".

Y concluye: "Pero sobre todo es un gasto inútil y una deslealtad con los ciudadanos al utilizar dinero público para fines partidistas. Mientras la Generalitat llega a final de mes gracias al Estado, la única fuente que le presta dinero a un interés razonable y así no debe endeudarse al 7% o al 8%, dado que es una institución quebrada, el Gobierno Mas dedica esta financiación atípica y excepcional a pretender desconectarse de dicha fuente creando las dichosas estructuras de Estado. ¿Alguien, mínimamente sensato, lo entiende?".

Más hechos raros. A Santiago Vidal, el magistrado que redactó la primera constitución catalana, le ha suspendido el CGPJ durante tres años. Se jugaba la expulsión definitiva, por lo que el castigo es duro, pero no letal. Pasan los minutos y Mas todavía sigue sin anunciar que propondrá a Vidal como vocal en el CGPJ, sustituto de Encarna Roca en el TC, presidente del Consejo de Garantías Estatutarias o consejero de Justicia, que esto sí está en su mano, por los servicios prestados. De momento, lo único que hay es que Carles Viver Pi-Sunyer (que llegó a vicepresidente del Tribunal Constitucional, poca broma) ya se ha puesto a redactar la constitución provisional mientras Santiago Vidal medita si presentarse a las municipales o a las autonómicas. Ya tiene hecha la campaña y mientras pasan los tres años...

En el resto de las Españas es noticia de portada la cumbre en La Habana entre Zapatero y Raúl Castro. Sí, el primero ya no es presidente del Gobierno y el segundo es el hermano de un espíritu, pero ahí están, en la portada del Gramma, para enorme mosqueo de García-Margallo, actual canciller. El flash cubano es del mismo Granma: "El General de Ejército Raúl Castro Ruz, Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, recibió el miércoles 25 de febrero al excelentísimo señor José Luis Rodríguez Zapatero, ex presidente del Gobierno español, quien realiza una visita a nuestro país. Durante el cordial encuentro, se abordaron temas de mutuo interés de la agenda regional e internacional, así como de las relaciones históricas que unen a ambas naciones. Al visitante lo acompañó el señor Miguel Ángel Moratinos Cuyaubé, ex ministro de Asuntos Exteriores. Por la parte cubana, estuvo presente el compañero Bruno Rodríguez Parrilla, ministro de Relaciones Exteriores. Previamente, Rodríguez Zapatero había sido recibido por el canciller cubano y el ministro interino de Comercio Exterior y la Inversión Extranjera, Antonio Carricarte Corona".

Compañero Parrilla y compañero güevon. En El Mundo, Federico Jiménez Losantos afila el hacha: "Que Zapaero y Moratinos vayan a Cuba como palanganeros de lujo del régimen de los Castro es natural. Vienen de calafatear los bajos fondos de la Guinea de Obiang, solos o con José Bono, y con el pío ex ministro de Defensa bien podrían acercarse a Caracas, patio trasero de la Isla Ergástula. Allí también prospera el monocultivo de la comisión política por venta de armas, petróleo y otras sustancias de las que sabrá más Monedero, que cobraba directamente en negro y tenía despacho en Miraflores, junto al Gorila Rojo. Algo sabrá de aquella venta, artillada por Bono, de patrulleras con tecnología norteamericana, cedida a España pero no para revendérsela al padrino de las FARC que estaba al borde de la guerra con Colombia. Los yanquis frustraron ese negocio pero habría otros, como los habrá en La Habana. Y como el gran negocio de Cuba es el sexo cutre y el macarra es el Estado, a palanganear".

En otro extremo del mundo, Siria, el "Estado Islámico" ha difundido un vídeo con la destrucción del museo arqueológico de Mosul. Que son contrarios a la idolatría, dicen. Las pérdidas son incalculables, pero mucho mejor degollar estatuas que cristianos. Si capturan al comando antiasirio, que los paseen por Arco. De vuelta a España, aumentan los decibelios catalanes contra los planes de Wert y la Conferencia Episcopal para la asignatura de Religión, que no es que sea una "maría", sino que hasta es optativa, como el macramé en los tiempos de la EGB. Protestan los padres asociados, los profesores y hasta los curas progres.

27 de febero, santoral del Abc: "S. Gabriel de la Dolorosa, Baldomero, Basilio, Hipólito de Jura, Julián de Alejandría y Lucas de Mesin".