Una imagen de los Mossos d'Esquadra, que llevan a cabo una operación contra el tráfico de drogas en Cataluña / MOSSOS

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Vida

Detienen al gerente del cine de El Masnou, condenado a 24 años por abusar de menores

Sobre él pesaba una orden de ingreso en prisión por abusos sexuales y prostitución de menores de entre 13 y 17 años a los que contrataba con el pretexto de repartir publicidad de las salas que regenta

20 mayo, 2022 14:38

Los Mossos d’Esquadra han detenido en Barcelona a L. G. M., de 76 años y exgerente del cine La Calandria de El Masnou, sobre el que pesaba una orden de búsqueda y captura y que estaba pendiente de entrar en prisión. La detención se produjo ayer en el barrio de Vallcarca, en el distrito de Gracia de Barcelona, después de que una persona alertara al 112 para comunicar que lo había reconocido.  

El gerente fue condenado a 23 años y ocho meses de prisión por abusos sexuales y prostitución de menores de entre 13 y 17 años a los que contrataba con el pretexto de repartir publicidad de las salas que regentaba.

El Supremo ratificó la sentencia

El que fue propietario de varias salas de cine como La Calàndria en el El Masnou y Foment Mataroní en Mataró, fue condenado en 2019 por la Audiencia de Barcelona a casi 24 años de prisión por tres delitos de abuso sexual, dos de ellos continuados, y por otros dos delitos de prostitución y corrupción a menores de edad.

En octubre del año pasado, el Tribunal Supremo ratificó esta sentencia. No obstante, el condenado no entró voluntariamente en prisión, por lo que la Audiencia de Barcelona emitió una orden de búsqueda y captura para su ingreso en la cárcel.

Los contrataba para repartir publicidad

Según la sentencia, el acusado mantuvo varios encuentros sexuales con menores a cambio de pequeñas cantidades de dinero aprovechándose de su inmadurez y de la posición de superioridad que ostentaba al ser su jefe.

El ahora detenido abusó de tres menores –uno de ellos con discapacidad cognitiva-- a los que captó con la excusa de repartir publicidad para sus sala de cine. Hasta que en 2010 las víctimas se pusieron de acuerdo y se presentaron en el cine La Calandria para recriminarle los abusos. Los menores, que grabaron la conversación, lo chantajearon con revelar el contenido de la misma a cambio de dinero. No obstante, la en 2011 el caso llegó a los tribunales y el proceso concluyó con la sentencia firme, sobre la que ni cabe ya recurso alguno, del Supremo.