Varias mujeres tomando la calle en una manifestación feminista / EFE

Varias mujeres tomando la calle en una manifestación feminista / EFE

Vida

Los detenidos por la presunta violación de Molins grabaron los hechos

Los Mossos analizan las imágenes y los tres acusados reconocen que mantuvieron relaciones sexuales, pero aseguran que fueron consentidas

27 junio, 2018 13:06

Los tres acusados por una presunta violación múltiple en la salida de una discoteca de Molins de Rei declararon ante la juez que las relaciones sexuales fueron consentidas. Los jóvenes, de entre 19 y 23 años, y ya en libertad provisional fueron detenidos después de que una joven de 21 denunciara una violación la madrugada del 19 de mayo.

La versión de la joven no concuerda con las declaraciones de los sospechosos. La ingesta de alcohol y drogas dificultó a la víctima recordar con exactitud lo sucedido, así como la identidad de los jóvenes. Pese a unas declaraciones confusas --dio tres versiones no coincidentes-- la joven aseguró que fueron cinco jóvenes los que participaron en la agresión. 

Tres detenidos y un parte médico

Tras realizar diversas pesquisas, los Mossos d'Esquadra detuvieron a tres jóvenes que estuvieron con ella aquella noche. Los acusados también aseguraron que la joven se subió de forma voluntaria al coche. Algo que dos de los amigos con los que la víctima acudió al local nocturno ratificaron: la vieron irse sentada en el regazo del copiloto junto a otros tres jóvenes.

Una vez se bajaron del coche las versiones son completamente distintas. La joven aseguró que la subieron al coche, la metieron en el maletero y la condujeron hasta una camino de tierra donde la agredieron sexualmente. El parte médico constata una serie de lesiones que podrían ser compatibles con los hechos que relata la joven. 

Los Mossos estuvieron investigando los hechos varias semanas. La joven recordaba que uno de los agresores llevaba un tatuaje. Tras dar con él, fue él mismo quien les condujo hacia el resto de amigos. Tres de los implicados en el caso reconocieron haber mantenido relaciones con la víctima, pero aseguraron que fue sexo consentido. Explicaron que al salir del recinto fueron a comprar cocaína y desayunar. Tras pasar un rato juntos fueron a un descampado donde la víctima fue quien les invitó a tener relaciones. “Era ella quien tomaba la iniciativa y en ningún momento manifestó repulsa, miedo o negativa”. Cuestionados sobre por qué dejaron a la joven en la estación, alegaron que iban demasiado bebidos como para conducir. 

Pruebas en vídeo

Pese a las distinas versiones, los Mossos analizarán las imágenes que han encontrado en los teléfonos móviles de los supuestos agresores. Las relaciones, consentidas o no, fueron grabadas por los sospechosos, algo que se toma como una prueba fundamental. 

Uno de los tres amigos hizo fotos y vídeos de la secuencia y servirá para esclarecer el caso. Los jóvenes reconocieron haber enseñado las imágenes a sus amigos. Por el momento, se mantienen las medidas cautelares con la retirada del pasaporte, la obligación de comparecer periódicamente en el juzgado y la prohibición de acercarse y comunicarse con la víctima.