La Policía Nacional y los Mossos d’Esquadra han detenido en municipios de Madrid y Barcelona a los cuatro miembros de una banda de ladrones que acumulan más de 250 antecedentes. Se les atribuye el robo cometido en octubre en una casa de subastas de Barcelona, de cuya caja fuerte sustrajeron un millón de euros en joyas.
De las cuatro detenciones, dos de ellas se han producido en Leganés y Pinto y otras dos en Martorelles y Mollet del Vallés. Todas se practicaron el pasado 7 de abril y han supuesto la desarticulación de las dos ramas de un grupo criminal itinerante especializado en robos con fuerza. No obstante, la investigación no se ha cerrado dado que los agentes buscan a un quinto implicado que se encuentra en paradero desconocido.
Un millón de euros en joyas
Fue en octubre, a raíz de un robo con fuerza en una sala de subastas de Barcelona, cuando los Mossos iniciaron sus indagaciones. Los autores accedieron al establecimiento mediante butrón y también a través del patio interior. Posteriormente, cortaron una reja de protección y violentaron una cámara acorazada con soplete de oxicorte. Las joyas sustraídas, o bien eran propiedad de la casa de subastas, o pertenecían a clientes que las habían depositado allí para su subasta.
Gracias a las imágenes recogidas por las cámaras de seguridad, tanto de la casa de subastas como de las inmediaciones, los agentes observaron cómo los ladrones entraban y salían del local en varias ocasiones con mochilas y maletas que contenían los útiles del robo, mientas otros miembros vigilaban el exterior. Por otra parte, los autores se llevaron gran parte de las imágenes de seguridad del establecimiento, y abandonaron en el lugar botellas de gases industriales y otras herramientas utilizadas para la comisión del robo.
Delincuentes especializados
Los agentes constataron, tras meses de investigación, que se trataba de delincuentes especializados, con gran experiencia y profesionalidad, además de tener conocimientos para la desactivación de alarmas, la realización de butrones, y forzamiento y apertura de cámaras acorazadas y cajas fuertes. Días después del robo aparecieron abandonadas y quemadas en una zona inundable del río Besòs diferentes partes no valiosas de las joyas, como maquinaria interna de relojes y elementos decorativos, y algunas etiquetas identificativas de los objetos para su subasta.
Los Mossos consiguieron identificar dos de los autores del robo, dos delincuentes especializados en este tipo de robos que estarían ubicados en la provincia de Barcelona. Este hecho permitió que días más tarde la Policía Nacional identificara y localizara en Madrid al resto de los investigados.
Operación simultánea
Ante estos hechos se constituyó un Equipo Conjunto de Investigación (ECI) que constató que los autores del robo formaban dos grupos vinculados entre sí. Las cuatro detenciones se practicaron de forma simultánea el pasado 7 de abril, así como otros seis registros, cuatro en los domicilios de los arrestados y otros dos en trasteros de Móstoles. Allí hallaron diversas herramientas y útiles para cometer robos con fuerza.
Fruto de los registros, los agentes intervinieron también 1.700 euros en efectivo, un equipo completo de soplete oxicorte, ordenadores portátiles, un disco duro, diversos teléfonos y tarjetas SIM. Asimismo, localizaron dos inhibidores de frecuencia, un equipo de escalada, el uniforme de una empresa de telefonía y numerosas prendas de ropa y calzado utilizadas durante los robos para impedir su identificación.