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Un control de movilidad de los Mossos d'Esquadra durante la desescalada / INTERIOR

La delincuencia repunta en Cataluña con la desescalada

Mossos registran una media de 821 delitos al día frente a los 353 durante el confinamiento total

6 min

Repuntan los delitos en Cataluña con el avance de la desescalada. Así, se han doblado respecto al confinamiento total, al pasar de 353 casos al día a 821, si bien siguen por debajo de la mitad respecto al pasado año, antes del coronavirus, cuando había 1.794 diarios.

Así lo han advertido los Mossos d'Esquadra, que han resaltado que únicamente las estafas, con 198 casos al día, quedan al margen de la reducción media del 71% de los delitos durante los dos meses de estado de alarma. Esta caída ha ido evolucionando con el paso de las semanas: una reducción del 77% al inicio, del 80% con el confinamiento total --del 28 de marzo al 13 de abril, con una media de 353 delitos al día--, del 70% al reanudarse la actividad esencial y del 54% con el inicio de la desescalada por fases --del 4 al 10 de mayo, con una media diaria de 821 delitos--.

Hurtos durante la pandemia

En números absolutos, entre el 14 de marzo, cuando se decretó el estado de alarma, y el pasado 10 de mayo, ha habido en Cataluña 28.700 delitos, frente a los 100.926 del mismo periodo del año anterior, lo que supone una reducción global del 71%. La flexibilización del confinamiento ha supuesto, según las fuentes, un incremento gradual de la delincuencia, con una salvedad, los hurtos --el más importante en la comunidad-, que han subido ligeramente tras una caída histórica que llegó a ser del 90%, pero que sigue muy lejos de sus valores habituales.

Los Mossos d'Esquadra con uno de los jóvenes detenidos por vender droga en su piso durante el estado de alarma / INTERIOR
Mossos d'Esquadra con un detenido por vender droga durante el estado de alarma / INTERIOR

Por su parte, se mantienen estables los robos con fuerza, aunque las fuentes no descartan que cuando se pueda ir a segundas residencias se descubran robos que se han producido estos días y que aún pasan desapercibidos, lo que comportaría un repunte de las denuncias.

Ciberestafas

Los robos con violencia e intimidación han subido también, especialmente en el Camp de Tarragona, hasta hoy la zona más poblada de Cataluña en la fase 1 del desconfinamiento, a la que este lunes se han sumado el resto de la las regiones sanitarias catalanas excepto Barcelona y sus áreas metropolitanas norte y sur.

Una de las principales preocupaciones de la policía catalana son las estafas, especialmente por internet, al ser un delito que, a diferencia de los hurtos, no requiere el contacto físico, por lo que se han mantenido a un nivel equiparable al de la etapa previa al coronavirus. En este sentido, han proliferado estrategias para obtener los datos de la tarjeta de la víctima, para lograr una transacción económica haciéndose pasar por un compañero de empresa o por un proveedor o la extorsión en el ámbito de la pornografía.

Violencia contra los agentes

Con el avance de la desescalada, el cuerpo también ha detectado un aumento de concentraciones no comunicadas, aunque aún son esporádicas, así como de actos de violencia contra la policía que no tienen un origen político o social, sino por intervenciones de los agentes en disputas vecinales en que aflora el descontento social tras semanas de confinamiento.

Imagen de la pelea multitudinaria con Mossos d'Esquadra y Guardia Urbana en Badalona / CG
Imagen de la pelea multitudinaria con Mossos d'Esquadra y Guardia Urbana en Badalona / CG

Ante esta situación, los Mossos mantendrán un dispositivo de seguridad que iniciaron hace meses en barrios como Sant Roc y la Mina, además del Raval, y también lo extenderán al de la Salud y en otras zonas de Cataluña en los que consideren necesario incrementar su presencia policial ante un posible repunte de la reacción desproporcionada a las intervenciones de los agentes, como las que se han producido recientemente en Badalona, Premià, Manlleu y Manresa.

Tráfico de drogas

Respeto al tráfico de drogas, el confinamiento ha provocado una drástica caída, si bien con el inicio de la desescalada las detenciones han aumentado en un 21%, en parte gracias a que es más fácil detectar a los vendedores, ya que con menos gente en las calles y más controles policiales quedan más expuestos.

En este sentido, los Mossos han contactado con las empresas de mensajeros para darles consejos para intentar detectar si transportan droga sin saberlo, y además han abierto nuevas vías de investigación, ante la sospecha de que varias redes criminales aprovechan las dificultades económicas de muchas empresas para intentar realquilar sus naves para cultivar marihuana y aprovechar sus flotas de reparto para distribuir la droga.