Una mujer en un cementerio lleno de flores / EFE

Una mujer en un cementerio lleno de flores / EFE

Vida

La atención psicológica presencial en procesos de duelo crece un 300% en cinco años

Los cambios sociológicos ayudan a romper tabúes y a crear nuevas tendencias en la utilización de servicios de atención psicológica

1 noviembre, 2016 18:32

La atención psicológica en procesos de duelo es un fenómeno relativamente nuevo desde el punto de vista de su generalización. Actualmente, ya sea presencial o por teléfono, es una práctica mucho más habitual que hace una década entre aquellas personas que han perdido un ser querido. Concretamente, en los últimos 5 años, la atención psicológica presencial en procesos de duelo ha crecido un 300% y la atención psicológica telefónica por las mismas causas ha aumentado un 150%.

Para alcanzar estas cifras, ha sido necesario romper tabúes sociales y superar creencias muy arraigadas sobre la necesidad de las personas de acudir al psicólogo en determinados momentos de su vida. Esta realidad, la de superar tabúes y creencias arraigadas, se registra de forma pronunciada en los últimos cinco años, durante los cuales "ha cambiado la tendencia de vivir de espaldas a la muerte", dice Nuria Soler, directora técnica de Psikered, una empresa especializada en ofrecer apoyo y atención psicológica personalizada a niños, adolescentes, mayores y personas en proceso de duelo.

Preparación de niños para la pérdida de un ser querido

La tendencia actual a sobreproteger a los niños provoca que éstos vivan de forma antinatural un proceso de pérdida. Una de las inquietudes de Psikered desde su fundación en 2006 ha sido y sigue siendo cambiar esta realidad, de forma que la relación de los niños y adolescentes con el duelo se normalice y sea lo menos traumática posible. No esconderles la verdad y no postergar el momento de comunicarles la noticia es fundamental para normalizar la situación.

En los últimos años, se ha trabajado especialmente, en aquellos casos en el que la pérdida es previsible, en la preparación psicológica de niños y adolescentes para cuando llegue el momento de la muerte del ser querido.

Consejos sobre cómo ayudar a un niño a afrontar el duelo

La guía La pérdida de un ser querido, editada por Psikered, en el capítulo "Los niños y adolescentes y el duelo", recoge diversos consejos prácticos para afrontar la pérdida de un ser querido, entre los que destacan los siguientes: comunicarlo lo antes posible en un lugar tranquilo y privado; utilizar un tono de voz sosegado y estar atento a la necesidad de contacto físico (abrazos, contactar suavemente en su espalda, sostener su mano...); es aconsejable decir la verdad sin eufemismos (fórmulas como "está en el cielo" o "se ha dormido" no hacen sino aumentar la confusión y ocultan parcial o totalmente la verdad, por lo que lo mejor es adecuar una respuesta veraz y comprometida con la realidad, pero adaptada a la edad y madurez del niño o adolescente, sin ahondar en detalles que no aporten nada, pero sin ocultar la tristeza y el dolor que siente el adulto que lo explica); explicar qué significa estar muerto (como, por ejemplo, explicar que el cuerpo se detiene y deja de funcionar) y las causas de la muerte (usar el adverbio muy puede ser un buen recurso: "Estaba muy, muy, muy, muy enfermo" o "ha sido un accidente muy, muy, muy grave").

También se aconseja hablar al niño sobre las posibles reacciones tras la pérdida: tristeza, enfado, confusión... ya que no hay una única manera de expresar el dolor. Por ello, hay que darle permiso para expresar emociones tanto negativas como positivas. Es conveniente Incluirle en los actos y reuniones familiares y, si es su voluntad, dejarle participar en los rituales de despedida; explicarle lo que va a ocurrir a partir de ahora; hacer partícipe de la despedida colaborando con la preparación de algún detalle especial que exprese su amor por la persona fallecida; y animarle a hacer preguntas, resolver dudas, miedos y preocupaciones, haciéndole saber que estamos a su lado y que cuidaremos de él.