Un grupo integrado por unos 600 migrantes indocumentados de origen subsahariano han saltado a primer hora de la mañana de este jueves el vallado fronterizo de Ceuta. El episodio se ha saldado con heridos, tanto por parte de las fuerzas de seguridad como de algunos subsaharianos. En total, once migrantes de origen subsahariano y cuatro guardias civiles han sido trasladados al Hospital Universitario de Ceuta.
La polícia ha denunciado que el salto de la valla se ha hecho mediante una "violencia inusitada sin precedentes". El resto de migrantes han sido dirigidos directamente hacia su Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI).
Los testigos presenciales que han atendido a los heridos han afirmado que los migrantes han utilizado "cal viva, heces y desodorantes a modo de lanzallamas" contra las Fuerzas de Seguridad para intentar acceder a territorio español.
Internamiento
El salto en grupo del doble vallado de la Finca Berrocal ha tenido lugar sobre las 7 de la mañana tras varios meses sin intentos parecidos. Se han utilizado "radiales con baterías" para superar el muro coronado con alambres con cuchillas.
Los migrantes irregulares se han dirigido directamente al CETI local, en el que permanecían acogidos más de 600 extranjeros, aproximadamente un 15% por encima de su capacidad máxima operativa, que es de 520 plazas.
Esta situación se debe al bloqueo de las salidas hacia la península causado por el colapso de las plazas conveniadas con distintas organizaciones no gubernamentales por la llegada de cientos de personas en pateras a las costas andaluzas cada fin de semana.
Uso de concertinas
El Equipo de Respuesta Inmediata ante Emergencias (ERIE) de Inmigración de la Cruz Roja ha atendido a 390 foráneos, 30 de ellos con heridas, de los que once son los trasladados al centro hospitalario.
El Ministerio del Interior, bajo el nuevo Ejecutivo socialista, está estudiando sustituir las concertinas del doble vallado por elementos defensivos que causen menos daños.