Primeras planas

Nervios de punta socialistas en vísperas de la investidura

En ERC dan por hecho el visto bueno del Consell Nacional, pero en el PSOE no las tienen todas consigo. Presiones sobre la Junta Electoral Central para que pase de Torra y Junqueras

2 enero, 2020 09:25

Arranca el año con la investidura de Pedro Sánchez en el horno de ERC, ese Consell Nacional de los 200 republicanos dispuestos a dar el visto bueno a la consititución del primer Gobierno de coalición de la historia de la democracia en España. Imposible no reparar en el aspecto vaticano del conciliábulo, que según la dirección de ERC es pan comido pero que mantiene al PSOE con los nervios de punta.

El País recoge las dos percepciones. De entrada, la republicana, que es el titular de la portada: "La cúpula de ERC blinda su apoyo a la investidura de Sánchez". La crónica es de Camilo S. Baquero, que escribe: "La cúpula de ERC mantiene plena confianza en que el acuerdo con el PSOE para desbloquear la investidura de Pedro Sánchez llegará a buen puerto y será ratificado este jueves por el consejo nacional, el máximo órgano de la formación republicana entre congresos y que está presidido precisamente por uno de los negociadores con los socialistas, Josep Maria Jové. “Habrá fumata blanca”, coinciden varios altos cargos republicanos. Del texto final del acuerdo solo ha trascendido que incluye una “validación democrática”, a través de una consulta, de los acuerdos a los que se llegue en la mesa de negociación de los dos Ejecutivos".

Sin embargo, en el PSOE no les llega la camisa al cuello. Nervios de punta, a flor de piel, como si los socialistas temieran un giro inesperado en el guion de la investidura, según explica en el mismo diario Anabel Díez: "Antes (de la abstención en la investidura de ERC), su Consell Nacional habrá tenido que dar hoy el visto bueno, en medio de un ruido ensordecedor del mundo secesionista, que no aprecia cuáles son las ventajas para el secesionismo de este acuerdo con los socialistas. Ante tanta acechanza, puede explicarse la prisa de Sánchez y la dirección socialista para que se produzca ya la investidura. Y da igual que resulte un tanto estrambótico que, sin estar el país en período de excepción o con algún peligro visible e inmediato, se desarrolle el pleno en el final de las fiestas navideñas, en sábado y domingo, coincidiendo con la noche de Reyes. Pero así será, y sin mucho esfuerzo por justificarlo, salvo el bienintencionado recurso a que España “necesita cuanto antes un Gobierno que empiece a trabajar en plenitud”, argumentan fuentes gubernamentales, después de casi un año de Ejecutivo en funciones".

Hay otros escenarios que influyen en la investidura, como la Junta Electoral Central, pista en la que repara La Razón para titular en primera que "Moncloa presiona a la Junta Electoral para salvar a Torra". Una eventual inhabilitación anticipada del presidente de la Generalitat sería un campo de minas en la operación investidura y añadiría elementos de conflicto en las ya de por sí tensas relaciones entre Junts per Catalunya (JxCat) y ERC, más complicadas y conflictivas tras el acuerdo entre republicanos y socialistas. La pieza de La Razón lleva la firma de Carmen Morodo: "El Gobierno en funciones está "maniobrando" sobre los magistrados de la Junta Electoral Central (JEC) para evitar que su decisión de este viernes, y la retirada del acta de diputado a Quim Torra y de europarlamentario a Oriol Junqueras, perjudique la investidura de Pedro Sánchez fijada para este fin de semana. Este periódico ha confirmado dentro de la JEC "las llamadas" y "presiones políticas" que se producen. La investidura ha disparado las tensiones entre JxCat y ERC y la caída de Torra puede precipitar los acontecimientos en la política catalana".

Los partidos de derechas están de los nervios ante el pacto entre PSOE y Podemos y por el apoyo de ERC a la investidura, tal como y recoge en El Diario Íñigo Aduriz: ""España se rompe". El mantra que la derecha utilizó hace tres lustros contra el primer Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero ha sido recuperado ahora por PP, Ciudadanos y Vox ante la inminente formación del Ejecutivo de coalición de PSOE y Unidas Podemos apoyado por el PNV y validado por ERC. Después de que el lunes se conociera el programa del Gobierno progresista, las tres derechas ya han empezado a ejercer una oposición frontal a la que no tienen previsto dar tregua durante toda la legislatura".

Hay otra forma de verlo. La parte del independentismo que ha quedado fuera de la ecuación se sube por las paredes, no considera un elemento a tener en cuenta la consulta popular que validaría los resultados de la mesa de negocación entre Gobierno y Govern y cree, lisa y llanamente, que ERC "investirá al carcelero". Tal es el titular del análisis en El Nacional de Agustí Colomines: "Aviat hi haurà govern a Espanya. Ha guanyat la repressió. Junqueras, Forcadell i Bassa investiran president Pedro Sánchez, el mateix individu, ara transvestit de xai, que el 2017 es va aliar amb el PP per desbaratar el procés d’autodeterminació i empresonar els dirigents independentistes. Costa d’entendre, però és així. Els presos ni tan sols es beneficiaran del tercer grau, que la consellera de Justícia (d’ERC) es nega a donar-los, i que vindrien a ser les famoses 155 monedes de plata de l’inefable Rufián, un dels pitjors dirigents que ha tingut mai ERC. Que un partit independentista estigui dirigit per algú que no n’és, és una d’aquelles ambigüitats de la modernitat líquida que va definir Bauman: qualsevol cosa canvia de forma precisament per la inconsistència de l’element. (...) Avui és reuneix el Consell Nacional d’ERC i aprovarà investir Pedro Sánchez, el carceller. La reunió serà un passeig militar. Triomfaran les tesis de la direcció, copada per càrrecs públics, per gent que rep un sou a canvi del silenci. Seran els mateixos que el 30 de gener es van negar a investir Puigdemont per por. Per por a perdre el sou, eh? Als partits d’avui dia els dissidents se’n van per evitar el mobbing, el maltractament polític al qual són sotmesos per ganàpies amb cotxe oficial".

En La Vanguardia se especula sobre la composición del futuro gabinete Sánchez. "Sánchez apuntala a sus pesos pesados en un gobierno con sorpresas" titula en portada el diario del grupo Godó. Carmen Calvo, Nadia Calvino, Marlaska, Montero, Luis Planas y Margarita Robles repetirán casi con toda seguridad, cuentan Juan Carlos Merino y Pedro Vallín. En cuanto a las sorpresas, son sorpresas. De la referida pieza: "La otra cuestión (tras la confirmación de los pesos pesados) que tanto en la Moncloa como en Ferraz dan por hecha, no obstante, es que Sánchez se reserva sorpresas en la composición del futuro Consejo de Ministros. “Al presidente le gusta y ya lo demostró cuando hizo su primer gobierno”, aseguran. Sánchez conformó en junio del 2018 lo que se llegó a denominar “gobierno bonito”, por vez primera con mayoría absoluta de mujeres y con sorpresas como, entre otras muchas, la del astronauta Pedro Duque. “Es un clásico, siempre gusta sorprender y dejar tu impronta”, afirman".

Ejercicio de melancolía en la portada de El Mundo: "Los votantes del PSOE preferían pactar con el PP que con ERC". Tal afirmación se basa en una encuesta de la que da cuenta Rafael J. Álvarez: "Hay más votantes del PSOE que prefieren un acuerdo con el PP que con ERC. La suma de quienes apuestan por un gobierno socialista en solitario con la abstención popular y por una coalición Sánchez-Casado en Moncloa (34,2%) supera a la de los que aprueban el apoyo de los independentistas catalanes (27%). Es decir, los votantes del PSOE demandan antes algún tipo de entendimiento con el PP que con ERC. Ya sea por activa, con un gobierno en coalición. Ya sea por pasiva, con la abstención del PP para un gobierno en solitario o incluso en acuerdo con Unidas Podemos".

Sigue la nota: "A menos de una semana para la investidura, la encuesta de Sigma Dos refleja que la mayoría de las personas que votaron al PSOE el 10 de noviembre prefiere fórmulas de gobierno para España que no necesiten el aval de ERC. La suma de todas esas posibilidades dobla a la opción que probablemente triunfará el 7 de enero, un gobierno de coalición con UP gracias a la abstención de ERC".

Más demoscopia. Sondeo de El Español. La política suspende, el orden y la ley, aprueban. Escribe D. Ramírez: "Las legislaturas fugaces y la banalización del debate parlamentario pasan factura. Los votantes suspenden --cada vez con peor nota-- a los partidos políticos, al Congreso y al Senado. Mientras tanto, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado se convierten, junto al Ejército y la Monarquía, en las únicas instituciones que logran el aprobado. Así se desprende del último sondeo realizado por SocioMétrica para este periódico".

Prosigue Ramírez: "Los partidos ya se sitúan en el 0,3 --sobre 10--, aunque al inicio de 2017 ya cosechaban un 1,2. El Congreso y el Senado están algo por encima, pero también se encuadran en el descalabro, lo que prueba la relación causa-consecuencia entre los políticos y las Cámaras. Sus números: un 1,1 y un 1 respectivamente. Hace dos años ya estaban por debajo del 3. Las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, sin embargo, mantienen su imagen cerca del notable. Policía y Guardia Civil oscilan, desde 2017, en torno al 7. El Ejército camina un peldaño por debajo: 6. A pesar de las delicadas tesituras que han conocido en la era del multipartidismo y el órdago separatista, esta encuesta les otorga un aprobado holgado. Los sindicatos, la Justicia, los empresarios y la Iglesia tampoco superan el 3, por lo que este sondeo dibuja un deterioro global de la "cosa pública". La prensa escrita, con un 4,6, también suspende".

2 de enero, santoral: Basilio Magno y Gregorio Nazianceno.