Primeras planas

El fiel masovero y la hipoteca “sí se puede”

Los invasores del 155 han respetado París y los naranjos bordes están intactos... Nuevos reyes del negocio inmobiliario: Torra y los Iglesias Montero

18 mayo, 2018 09:30

Carles Puigdemont tomó posesión ayer jueves en el Palau de Generalitat a través del apoderado Quim Torra, que no se ha visto en otra y está más contento que unas castañuelas. Imaginen. Es como esos chicos que fichan por el Barça y lo primero que dicen es que lo flipan porque antes veían a Messi por la tele y ahora le ven la chorra en el vestuario. El hombre se pasea por las estancias de la Generalitat, rastrea los fantasmas de Macià y Companys, acaricia los muros y mira de reojo el despacho en obras del león de Amer. El perfecto masovero, Torra. Al parecer, los esbirros del 155 se han retirado del recinto sin causar desperfectos. Los naranjos bordes están intactos.

Como los separatistas nunca se equivocan, la "discreta" y "sobria" ceremonia les ha parecido de lo más solemne y pertinente con los consejeros en la cárcel y el "presidente" en Berlín. A El País no se la cuelan y le atizan a Torra un editorial titulado "Un ultra toma posesión". Ahí va un párrafo en todo el hoyo de las agujas: "Poder autonómico, sí, se dicen a sí mismos, pero para destruirlo desde dentro en favor de un separatismo cada vez más ultra y más racista, como el de sus amigos de la Lega italiana o de los flamencos xenófobos, lo que no disuade ni inhibe a alguno de sus ideólogos y periodistas de cabecera de antigua filiación progresista y que arriesgan a terminar como acabó un notable protosocialista, Benito Mussolini. Su silencio es lo más estruendoso de la deriva ultra que simboliza Torra".

El diario de Prisa también le casca al Gobierno por ausentarse de la "jura" de los tres minutos. Rajoy se resiste a adoptar las medidas de excepción que recomienda Albert Rivera. El Ejecutivo está encantado porque Torra ha aceptado retrasar su viaje a las cárceles de la meseta hasta el lunes. Atisba una posibilidad. Son unos optimistas patológicos. 

Portada de 'La Vanguardia' del 18 de mayo de 2018

Portada de 'La Vanguardia' del 18 de mayo de 2018

Al hilo de las primeras maniobras del presidente en funciones, La Vanguardia aborda el retraso en la formación de Govern: "Torra quería aprovechar la visita para recibir en persona la respuesta a la propuesta de restituir en sus puestos a todos los exconsellers que lo deseen. Los de ERC ya han declinado el ofrecimiento, a excepción de Antoni Comín –en Bruselas–, que está decidido a repetir pendiente de una conversación con Torra, mientras que los del PDeCAT, en cambio, están dispuestos a aceptarlo, incluido Lluís Puig, también en Bruselas. En las últimas horas, no obstante, desde Junts per Catalunya (JxCat) –marca en la que está integrado el PDeCAT– se les habría hecho llegar –a Turull, Rull y Puig– la conveniencia de no hacerlo, a fin de facilitar, en la misma línea que defiende ERC, la constitución de un Govern realmente efectivo y evitar más consecuencias negativas de la aplicación del 155".

En materia de Torra, El Confidencial aporta una pieza sobre la vida laboral de Torra y el manejo de sus finanzas. El corredor de seguros que vivió dos años en Ginebra es un genio en el arte de perder dinero sin perder dinero, cosa para la que se necesitan las dotes del sablista, eso del don de la oportunidad o "momentum", según el doble de Puigdemont para las escenas de acción. El caso es que Torra, cuenta la información, es un potentado de ladrillo con el riñón forrado. Antonio Fernández escribe: "Números que chocan con un editor que no ha ganado ni un euro con sus negocios particulares. En 2007, la compañía Winterthur lo despidió. El 23 de marzo de 2010, lo recordaba: 'El pasado 16 de marzo hizo tres años que fui ejecutado al alba. Después de 18 años trabajando en una empresa de seguros, los nuevos propietarios, una multinacional con sede en París, decidieron prescindir de mis servicios. Tuvieron el elegante detalle de fusilarme mientras me encontraba con mi esposa y los niños viviendo en Suiza'. Viendo la trayectoria económica del molt honorable, muchos quisieran que los ejecutaran así".

Con todo lo de Torra se ha disparado el interés por la arqueología digital en las fosas sépticas, las mal llamadas redes sociales. El Nacional ha puesto a secar la juventud de Elisenda Alemany, que mantuvo una especie de diario fotográfico en el que se incluye la apreciación de que los españoles siempre se la meten a los catalanes por delante y por detrás. Como lo oyen: "No van ser 14 mesos de setge a Barcelona. El nostre país no és el que volem des de 1714. I els espanyols continuen follant-nos pel darrere i pel davant. Sense permís". Toma lacasitos.

La pareja de moda en España, Pablo Iglesias e Irene Montero, nuestros Harry y Meghan comunistas se han comprado un chalé en Galapagar que parece la finca de Jesulín. Nada más le falta un cachorro de tigre y el letrero de "Ambiciones". Al respecto del furor inmobiliario de los Iglesias Montero, en el e-notícies recuerdan cuando Pablo arremetía contra De Guindos por comprarse un ático. Magnifica hipoteca (El independiente). Parece fake de lo buena que es. Más de medio millón de euros a treinta años que salen por 1.600 euros al mes. Si es que ya dicen que alquilar es tirar el dinero. Se está inflando una burbuja idéntica a la que estalló en 2008. Sigan, sigan.

18 de mayo, santoral: Claudia, Dióscoro de Alejandría, Potamón y compañeros.