Terricabras y Maragall se presentan como "los hombres de Mas en Europa"

ERC se prefigura como el gran rival de CiU en Cataluña en las próximas elecciones europeas, del 25 de mayo, y las encuestas contemplan la posibilidad del sorpasso, que el partido independentista supere a la federación nacionalista en los comicios. Aún así -o justamente por eso-, los candidatos de ERC procuran no hacer un discurso agresivo contra sus socios -externos- en el Gobierno de la Generalidad. Hasta el punto de presentarse como "los hombres de Mas en Europa".

Así lo aseguró el pasado miércoles el número dos de la lista independentista, Ernest Maragall -líder de NeCat y ex dirigente socialista-, y con esta misma idea ha jugado este lunes el número uno de la candidatura, el filósofo Josep Maria Terricabras. "Querríamos ser los hombres del presidente de la Generalidad en Europa", dijo Maragall, refiriéndose a él y a Terricabras.

La clave del discurso de los candidatos independentistas es la posibilidad cierta del sorpasso. Y, más concretamente, su deseo de ahuyentar de los votantes la duda de que una derrota de CiU en las elecciones pueda afectar al liderazgo de Artur Mas en el proyecto secesionista.

De hecho, desde la propia CDC se ha lanzado esta idea, como hizo ya hace unas semanas su candidato, Ramon Tremosa -abiertamente independentista-, cuando, a pesar de soltar elogios a ERC, pidió una victoria de CiU en las europeas para que no parezca que el proyecto secesionista "pierde gas".

Reforzar el "proceso catalán"

En esta misma línea, Terricabras ha sostenido este lunes que una victoria de ERC "no reforzaría partidistamente" a la formación que lidera Oriol Junqueras, sino que reforzaría "el proceso catalán" independentista.

"Me alegrará ver que los grupos a favor del derecho a decidir obtienen un resultado brillante", ha remarcado, añadiendo que "una pelea entre los partidos que van en la misma dirección es ridícula".

El pasado miércoles, junto a Maragall, Terricabras ya interpretó en esta dirección la última encuesta del Centro de Estudios de Opinión (CEO), que plantea un empate técnico entre CiU y ERC. Así, la presentó como una buena noticia para el independentismo en general, rehuyendo cualquier lucha partidista. "La suma de las fuerzas soberanistas saca un resultado magnífico", destacó. "No quedaríamos encogidos si quedáramos segundos", insistió.