Quim Torra junto a un lazo amarillo, símbolo del desafío independentista / EUROPA PRESS

Quim Torra junto a un lazo amarillo, símbolo del desafío independentista / EUROPA PRESS

Política

El temor de los funcionarios por la purga de Torra

El cruce de mensajes de los trabajadores, al que ha tenido acceso Crónica Global, alude a la victoria del “sector belga” en la “guerra convergente” por el controlar el dinero de la Generalitat

10 septiembre, 2020 00:00

“Esta guerra es para la única cosa que un convergente está dispuesto a romperse la cara con quien sea: los dineros, la viruta, la pasta gansa, el maldito parné”. Este es uno de los mensajes que, tras los cambios anunciados en el Govern, circularon entre los funcionarios de la Generalitat.

Al cese de tres consejeros demasiado tibios para los designios independentistas de Carles Puigdemont, le ha sucedido una renovación del sotogoverno en forma de dimisiones, voluntarias o inducidas de directores generales y cargos de confianza. Esos cambios han sido especialmente significativos en la Consejería de Empresa y Conocimiento, donde el activismo de Ramon Tremosa, como explicó este medio, ha provocado que altos cargos y técnicos hayan expresado su voluntad de dejar el departamento.

"Las consecuencias de equivocarse de bando"

Los funcionarios de esta consejería, así como de las de Interior y Cultura, no son ajenos a esa utilización partidista del Govern y, según se desprende de los mensajes escritos en sus foros a los que ha tenido acceso Crónica Global, temen ser víctimas de una “guerra en Convergència” y avisan de las “consecuencias de equivocarse de bando”.

Ramon Tremosa y Àngels Chacón / EFE

Ramon Tremosa y Àngels Chacón / EFE

Los neoconvergentes (sector belga) están en guerra con los viejos convergentes (sector Barcelona) y, claro, vienen mal dadas para mucha gente que trabaja en la Administración porque… ¿a qué sector se apunta cada uno?”, escribe un funcionario en alusión a la fuga de Puigdemont a Bélgica.

"La pasta gansa, el maldito parné"

“Que nadie piense que esta guerra es para mejorar la vida de los catalanes o hacer más grande Cataluña, o para luchar contra el coronavirus, no, no, no”, precisa otro, quien afirma que “esta guerra es para la única cosa que un convergente está dispuesto a romperse la cara con quien sea: los dineros, la viruta, la pasta gansa, el maldito parné”.

Carles Puigdemont, líder de JxCat, y Artur Mas, presidente del PDECat, en un fotomontaje / CG

Carles Puigdemont, líder de JxCat, y Artur Mas, presidente del PDECat, en un fotomontaje / CG

Están convencidos, quienes participan en esos foros, de que ante la proximidad de las elecciones, la maniobra de Junts per Catalunya es controlar del dinero de la Generalitat porque “la Administración solo subvenciona, y de qué manera, no hay límite, a los partidos con representación parlamentaria”, en referencia a las dificultades que tendrá Puigdemont para acceder a cuotas mediáticas y subvenciones al tratarse de un partido de nuevo cuño.

"Jurando lealtad eterna al sector belga"

“Quien tenga los dineros, tendrá una campaña electoral con cara y ojos podrá repartir a los amigos, parientes y conocidos con contratos, asesores de campaña, locales, lo que haga falta”.

“De momento, han caído tres consejeros y veremos la limpieza que hacen en sus departamentos. Seguro que más de una persona está jurando lealtad eterna al sector ganador, de momento el belga”, añade otro. “Las purgas se hacen pensando en el futuro no vaya a ser que haya otro cambio”, reflexiona otro, en referencia a una derrota electoral de JxCAT, que así ya tendría sus piezas colocadas en el Govern.

“Lo que hay en juego es la nómina y ¡ojo! como es una administración muy endogámica también está en juego las nóminas de parientes, amigos, conocidos”… concluye un trabajador.