Pedro Sánchez visitará el Tribunal de Derechos Humanos en pleno juicio del 'procés'

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, visitará el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) el próximo 7 de febrero, en unas fechas en las que ya se estará realizando en España el juicio por el 'procés' independentista de Cataluña.

Ese mismo día, Sánchez viajará a Estrasburgo para visitar el Consejo de Europa. Fuentes del Gobierno reconocen que su idea es aprovechar la jornada para acudir también al TEDH. La intención del jefe del Ejecutivo es conocer los trabajos del tribunal, pero también explicar su política de defensa de los Derechos Humanos.

Rebatir al independentismo

Sánchez quiere mantener un diálogo con el tribunal sobre algunas sentencias dictadas o por dictar en España, y darles su visión en asuntos relacionados. Aunque esas mismas fuentes no han aclarado si entre ellos figura el procés, a nadie se le escapa que la visita se producirá en plena celebración del juicio a los políticos independentistas imputados por el 1-O. Y el hecho de que, en varias ocasiones, esos mismos políticos han invocado a la justicia europea en su intento de cuestionar las resoluciones de los tribunales españoles.

En el Gobierno aseguran no estar preocupados por la imagen exterior por el juicio a los líderes independentistas procesados. Y señalan incluso que es bueno que el proceso tenga visibilidad para demostrar que es garantista, en contra de lo que sostienen varios imputados.

Respaldo internacional

En el Ejecutivo consideran que en la comunidad internacional nadie cuestiona que España es un Estado de derecho, y que los dirigentes encausados tendrán un juicio justo, y así se comprobará dentro y fuera de España.

Desde Moncloa entienden que el procés catalán provoca ya cierto cansancio, incluso hartazgo, en la escena internacional, ante las pretensiones de los independentistas, sobre todo en su propósito de buscar una mediación externa.

Batacazos independentistas

También creen que el independentismo ya se dio dos grandes mazazos en el exterior de los que no se va a recuperar: por un lado, no obtuvo ningún reconocimiento exterior al procés, y por otro, tampoco consiguieron atraer al mundo económico y empresarial para que se asentara en Cataluña.

Antes de su viaje del 7 de febrero, Sánchez habrá visitado ya Estrasburgo para intervenir, el próximo 16 de enero, ante el pleno del Parlamento Europeo.