Rufián vuelve a sufrir la ira de los independentistas mientras insiste en el pacto PSOE-UP

Segundo escrache a ERC y a Gabriel Rufián en menos de 24 horas. El portavoz parlamentario de la formación de Oriol Junqueras en el Congreso volvió a sufrir este sábado un nuevo escrache por parte del independentismo radical en la localidad barcelonesa de Mataró. Una situación que empieza a convertirse en habitual tanto para él como para su partido, dado que en la víspera ya vivió otro asedio en el vecino pueblo de Dosrius. ¿El motivo? Su abstención en la fallida investidura de Pedro Sánchez como nuevo presidente del Gobierno.

La protesta del sábado, convocada a través de las redes sociales a través de la plataforma #Stop155 al Consell Comarcal del Maresme, fue secundada por numerosos manifestantes secesionistas, que se concentraron delante del Ayuntamiento de Mataró para expresar su repulsa a los republicanos por no haber votado en contra de Sánchez como nuevo presidente del Gobierno. Algo que sí hizo, en cambio, JxCat.

Gritos y abucheos

El diputado de ERC y el resto de dirigentes de su formación fueron abucheados e increpados con gritos de "¡fuera!" o "¡dignidad!" durante los actos institucionales que tuvieron lugar con motivo de la fiesta de Les Santes de Mataró, incluida la misa o el desfile de autoridades por las calles del pueblo. Los manifestantes llevaban pancartas, urnas del referéndum ilegal del 1-O y los típicos lazos y atuendos amarillos para apoyar a los políticos en prisión preventiva por el procés independentista catalán, tal y como puede apreciarse en este vídeo.

Llaman "carcelero" a Pedro Sánchez

"Hoy le decimos a Rufián que recuerde que el 1-O no votamos esto. Stop 155. No a todo", exponen los convocantes a través de su perfil de Twitter.

En su llamamiento, #Stop155 manifestaba su "rechazo a cualquer pacto o abstención con los partidos del 155", y conminaban a "expresar el rechazo a los intentos de blanquear y hacer presidente al carcelero Pedro Sánchez" (sic).

Rufián, a la suya

Aparentemente ajeno a las protestas del secesionismo más radical --alineado con las tesis del prófugo Carles Puigdemont y el resto de dirigentes postconvergentes de boicotear y votar en contra de cualquier acuerdo de investidura--, Rufián ha insistido este domingo en su decisión de no obstaculizar un acuerdo de Gobierno entre el PSOE y Unidas Podemos, a los que insta a dejar de "echarse la culpa los unos a los otros" y "sacar un rato para hacer su trabajo y ponerse de acuerdo".

Al tiempo que decía esto, el diputado de ERC se hacía eco de otro tuit de su excompañero en el Congreso Joan Tardà, que aboga por responder a la futura sentencia del Tribunal Supremo a través de "movilizaciones pacíficas, cívicas, permanentes y masivas" y convocando elecciones.