El Gobierno está decidido a impulsar la movilidad eléctrica como un "sector estratégico" en la economía pos-Covid. Así lo ha expresado la ministra Reyes Maroto en una entrevista concedida a Catalunya Ràdio: "El marco de los fondos europeos nos va a permitir transformar y acelerar la transición digital y tecnológica. Espero que podamos aprovecharlos con toda la cadena de valor y mantener un liderazgo de Cataluña y España".
La titular del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo participa este viernes en la presentación del barómetro Auto Mobility Trends impulsado por Coche Global. Horas antes de su participación en el evento, Maroto se ha mostrado esperanzada sobre el futuro del sector automovilístico. "El barómetro dará unas claves para ser optimistas", ha indicado.
Acompañar el cambio industrial
La ministra ha reivindicado las políticas emprendidas por el Gobierno para apoyar a la industria: "Hemos movilizado más de 1.000 millones de euros". Maroto ha destacado el Plan Renove --ayudas a la compra de coches nuevos-- y el Plan Moves 2 --pensado para incentivar la compra de vehículos alternativos-- como palancas de cambio del parque móvil. "Hay demanda y había que estimularla", ha resumido.
La política no ha aclarado si ambos programas se mantendrán el próximo año, si bien ha apuntado que el Gobierno prefiere enfocar las ayudas a la movilidad eléctrica: "De cara al ejercicio presupuestario de 2021, veremos si es necesario centrar todo el impulso en la demanda de Moves 2. Los fabricantes están haciendo una apuesta por la electromovilidad y podemos alinear estrategias".
Maroto, "prudente" sobre Nissan
Maroto se ha mostrado precavida sobre el futuro de las instalaciones de Nissan en la Zona Franca de Barcelona. "Hay un trabajo de muchas horas para identificar proyectos industriales y, por lo tanto, quiero ser prudente", ha dicho. La representante no se ha pronunciado sobre la viabilidad de ninguno de los proyectos concretos que han saltado a los medios de comunicación para salvar la fábrica de la multinacional nipona, cuyo cierre está previsto para diciembre de 2021.
“Siempre que se habla de reindustrialización, corres el riesgo de que el inversor, que no quiere estar en los medios, entienda que este proceso le puede disuadir e irse a otro país", ha explicado. Por eso no ha querido marcarse ningún plazo concreto ni ofrecer detalles sobre el debate de la mesa sobre el futuro de Nissan compartida por sindicatos, Generalitat, Gobierno y fabricante. "Generar falsas expectativas que se frustren es casi peor que anunciar algo y que no se pueda desarrollar", ha zanjado.