Mariano Rajoy, en la convención del PP celebrada en Barcelona.

Mariano Rajoy, en la convención del PP celebrada en Barcelona.

Política

Rajoy insiste en la coalición con PSOE, pero subestima el apoyo de Ciudadanos

Aprovecha su presencia en Cataluña para arremeter contra quienes pretenden quebrar la unidad de España y “dividir familias”

9 abril, 2016 14:03

El presidente en funciones Mariano Rajoy, ha vuelto a defender su propuesta de gobierno de coalición con el PSOE, presidido por el PP, relegando a Ciudadanos a puro “invitado”, dado que “sus votos no son decisivos.

Rajoy, que ha clausurado una convención del PP en Barcelona titulada “Pacto por el fortalecimiento institucional”, reaparece por primera vez tras la fallida negociación de PSOE, Podemos y Ciudadanos para formar gobierno.

El presidente en funciones, arropado por la cúpula popular, ha vuelto a recordar que venció las elecciones del 20D, aunque el resultado de las mismas “fue distinto al de las elecciones celebradas hasta ahora desde 1977, pues el partido ganador siempre pudo gobernar”. Ha dicho que el PP “ha entendido que los ciudadanos han dicho que hay que pactar y formar un gobierno serio que afronten los problemas del país”.

"Un espectáculo"

“No hemos participado en un juego que conduce a ninguna parte ni en una espectáculo”, ha dicho el dirigente popular, quien ha insistido en una coalición con PSOE. “Y si se quiere sumar Ciudadanos, cuyos votos no deciden, será bien recibido”, ha añadido.

Tras subrayar que la unidad de España, la lucha contra el terrorismo y la corrupción, y la creación de empleo unen a estas formaciones, ha admitido que existen diferencias entre los tres partidos, pero ese modelo de coalición “se aplica en 15 en 28 de los países de la Unión Europea”. Ese gobierno de coalición, presidido por el PP, “daría un buen mensaje a los agentes económicos y a quienes nos tienen que dar dinero”.

Derrota en Las Cortes

Considera que el PSOE “está en su derecho” de no querer sentarse a negociar con el PP, pero su propuesta “ha sido derrotada en las Cortes”. Ha avisado de que España necesita un gobierno “estable con cohesión ideológica, con mayoría en el Congreso y en el Senado”.

Ha aprovechado su presencia en Barcelona para defender rechazar la independencia de Cataluña. “No queremos divisiones entre familias y, mucho menos, que nadie se sienta extranjero en su país”. Por ello “no se va a permitir la quiebra de la unidad de España o que alguien cuestione la igualdad entre españoles”.