Un grupo de turistas de viaje por España / EFE

Un grupo de turistas de viaje por España / EFE

Política

El PSC rechaza la eliminación de la figura del agente de viajes

Los socialistas han presentado enmiendas a la desregulación de un sector en pie de guerra que augura un mayor intrusismo e inseguridad jurídica

27 enero, 2017 00:00

El PSC ha presentado enmiendas a la reforma legal impulsada por el Gobierno catalán para desregular la figura del agente de viajes. La medida del Ejecutivo autonómico ha puesto en pie de guerra a un sector que augura el aumento del intrusismo y de la inseguridad jurídica.

Tal como publicó Crónica Global, el proyecto de ley de medidas fiscales, administrativas, financieras y del sector público para 2017 incluye una modificación de la Ley 13/2002 de Turismo de Cataluña que sustituye la figura del agente de viajes por otra mucho más ambigua, la del consultor.

La Asociación Corporativa de Agencias de Viajes Especializadas (ACAVE) ha presentado una serie de alegaciones que la formación socialista ha hecho suyas. La diputada del PSC Alicia Romero califica de "barbaridad" estos cambios que pretende llevar a cabo el Gobierno catalán, y confía en que, finalmente, se acepten las enmiendas de su grupo.

Sin convenio colectivo

Advierten de que eliminar la denominación de agente de viajes –se sustituye por la figura del consultor o empresario– supone graves afectaciones en materia laboral, fiscal y operativa. Implicaría, en primer lugar, que estos trabajadores dejarían de estar sujetos al convenio colectivo del sector.

La Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) exige una acreditación de agente de viajes para poder emitir billetes a través de Sistemas Informatizados de Reserva de forma centralizada. Si se pierde esta consideración, "cerrarían gran parte de las agencias existentes en Cataluña –1.713 en la actualidad–", alertan desde ACAVE.

Asimismo, la derogación de los artículos 54 y 55 de la Ley de Turismo catalana pretendida por el Govern eliminaría también la definición legal de viajes combinados, hecho que generaría una "situación de inseguridad jurídica para los usuarios turísticos catalanes".