Manifestantes convocados por Barcelona És Imparable en la plaza Sant Jaume / PABLO MIRANZO - CG

Manifestantes convocados por Barcelona És Imparable en la plaza Sant Jaume / PABLO MIRANZO - CG

Política

La plaza Sant Jaume se llena para pedir la dimisión de Colau

Barcelona És Imparable concentra a un millar de personas en su primera manifestación contra la gestión de la alcaldesa

21 octubre, 2021 21:06

“Somos los imparables de Barcelona”. Así ha descrito Gerard Esteva, representante de la Unión de Federaciones Deportivas de Cataluña (UFEC) e impulsor de Barcelona És Imparable, el nuevo movimiento que ha debutado esta tarde con una movilización que ha concentrado a cerca de un millar de personas en la plaza de Sant Jaume de Barcelona para criticar la gestión de la alcaldesa Ada Colau.

La nueva iniciativa, escéptica con las políticas municipales, ha logrado celebrar su primer acto frente al consistorio de la ciudad con una plaza prácticamente llena. No obstante, las divisiones internas han empañado la convocatoria. Si bien la organización ha querido moderar su ataques al ayuntamiento y ha mostrado decepción también con el papel de la oposición --su intención, de hecho, era evitar ser vistos como una agrupación anti-Colau--, los asistentes sí han protagonizado un clamor unánime contra la alcaldesa.

Un inicio caótico

Minutos antes de iniciarse la lectura del manifiesto de la plataforma, un pequeño grupo ha empezado a mostrar pancartas y lanzar gritos contra Colau --y a favor de la ampliación del aeropuerto de El Prat--. Con sirenas, bocinas y megáfonos han logrado no solo hacer ruido, sino que su indignación se propagara rápidamente entre los manifestantes.

De hecho, una ya ensordecedora multitud que vertía todo tipo de reproches contra la fachada consistorial ha impedido que los parlamentos de los impulsores del movimiento pudieran iniciarse a las siete, como estaba previsto. Lo han hecho casi un cuarto de hora más tarde, y con bastante dificultad.

Manifestantes contrarios a Colau en la plaza Sant Jaume / PABLO MIRANZO - CG

Manifestantes contrarios a Colau en la plaza Sant Jaume / PABLO MIRANZO - CG

“Tarjeta roja”

Los aplausos han sido tímidos y contados, mientras que los gritos de “dimisión” y “fuera” dirigidos a la alcaldesa han interrumpido en varias ocasiones los discursos. Esteva se ha llegado a dirigir a los presentes para pedir “un poco de respeto” hacia las intervenciones.

El impulsor de Barcelona És Imparable ha pedido levantar una simbólica “tarjeta amarilla” contra el ayuntamiento. “Es la primera advertencia, si no mejoramos estos elementos [economía, seguridad, movilidad], volveremos para enseñar la tarjeta roja”, ha asegurado el portavoz. No obstante, muchas de las pancartas levantadas en ese momento han sido en efecto de color rojo y al grito de “dimisión”. 

Timidez del empresariado

El movimiento ha logrado unir a entidades vecinales, comerciales, deportivas, culturales, turísticas y estudiantiles. Entre las organizaciones que secundan la iniciativa, se encuentran numerosas asociaciones de vecinos de la ciudad, ejes de comercio, el Gremio de Hoteles o el Colegio de Agentes Comerciales, con una participación destacada en el acto por parte de Barcelona Oberta, Tsunami Veïnal, la UFEC y el sindicato de estudiantes FNEC, vinculado a la postconvergencia. También ha asistido CSIF, uno de los sindicatos que representa a los trabajadores de la Administración municipal.

Protesta contra Colau en la Plaça Sant Jaume / PABLO MIRANZO - CG

Protesta contra Colau en la Plaça Sant Jaume / PABLO MIRANZO - CG

Por contra, los grandes ausentes han sido los representantes empresariales. Más allá de la asistencia de algún directivo de empresas vinculadas a dichas asociaciones comerciales, Barcelona És Imparable aún no agrupa de forma abierta a grandes actores sociales o patronales. También queda en el aire, en estos momentos, su presentación oficial y si este movimiento derivará en articular una alternativa de consenso para desplazar a los comunes de Ada Colau de la alcaldía de la capital catalana.