El presidente de la Generalidad, Artur Mas

El presidente de la Generalidad, Artur Mas

Política

Mas se reafirma en su plantón a Sáenz de Santamaría pese a las críticas recibidas

"Vergüenza", "ridículo" o "irresponsabilidad tremenda" son algunos de los calificativos que la oposición dedica al presidente de la Generalidad por negarse a acudir a un acto con la vicepresidenta del Gobierno -que ejercía de presidenta del Gobierno en funciones- si no podía presidirlo. El dirigente nacionalista asegura que estaba en juego "el prestigio" de la Generalidad.

18 octubre, 2013 19:53

El plantón que este jueves ha dado el presidente de la Generalidad, Artur Mas, a la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, en un acto de Fomento del Trabajo en Barcelona, no ha sido bien recibido por el resto de partidos.

Mas quería ser el último en intervenir en el acto, al considerar que su autoridad es mayor que la de la vicepresidenta del Gobierno. Sin embargo, los servicios de protocolo de la Moncloa no se lo permitieron, porque con Rajoy ausente -está de viaje en Panamá para asistir a la Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno-, esta ejerce como presidenta del Gobierno en funciones. El dirigente nacionalista se enfadó y anuló su presencia en el acto.

El portavoz del PP catalán en el Parlamento autonómico, Enric Millo, ha asegurado haber sentido "vergüenza" por lo ocurrido. Mas "dio la espalda a los empresarios catalanes y al Gobierno", ha señalado. "Hizo el ridículo", ha insistido.

Tampoco el PSC ha visto con buenos ojos el gesto de Mas. Su primer secretario, Pere Navarro, ha lamentado que el dirigente nacionalista esté más preocupado por el protocolo que por luchar contra la pobreza y defender la sanidad. "Debería preocuparse de solucionar los problemas de los catalanes", ha indicado.

Incluso el ex presidente de la Generalidad y senador José Montilla (PSC) ha señalado que el plante de Mas perjudica a la imagen de Cataluña. "Yo nunca tuve problemas de protocolo. Que se peleen por quién cierra un acto no es positivo", ha añadido.

"Una irresponsabilidad tremenda"

La portavoz del PSOE en el Congreso, Soraya Rodríguez, ha considerado "de una irresponsabilidad tremenda" que "una falta de entendimiento en una cuestión de protocolo" haya causado ese "espectáculo". Y ha pedido "diálogo y serenidad" a ambos gobiernos, nacional y autonómico.

El portavoz económico del PP en el Congreso, Vicente Martínez Pujtalte, ha apuntado a Mas como el único responsable de lo ocurrido.

Desde ICV, su portavoz en el Congreso, Joan Coscubiela, también ha sido crítico con Mas, y ha apuntado que este debería haber plantado a la patronal por sus políticas. "Con ese acto, hubiera defendido la dignidad de los catalanes mejor de lo que lo hizo ayer", ha explicado.

Sáenz de Santamaría quita hierro a lo ocurrido

Por su parte, la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha querido quitar hierro a lo ocurrido, aunque ha apuntado que que será Mas el que tendrá que explicar "los motivos" de su ausencia.

Sáenz de Santamaría ha apelado a la "estabilidad y a la convivencia", y ha indicado que, aunque el de ayer no era un acto del Gobierno, era "importante" estar presente porque "todos teníamos algo que decir" ante los empresarios, "cada uno en su parte de competencias y responsabilidades". Además, se ha confesado "muy agradecida por la invitación".

Sáenz de Santamaría ha recordado que "no es necesaria ninguna delegación" concreta, sino que "con carácter general" la vicepresidenta del Gobierno "asume" las funciones del presidente, tal y como viene determinado "por un reglamento".

En relación a la deriva independentista del presidente autonómico, la vicepresidenta del Gobierno se ha limitado a constatar que Mas ha "abierto un proceso que no sabe cómo cerrar".

Mas se reafirma en su actitud

Desde la Generalidad, en cambio, se reafirman en su posición. En declaraciones a los medios, el presidente autonómico ha justificado su ausencia en el acto del jueves porque estaba en juego "el prestigio" de la Generalidad:

"Se me invitó al acto para presidirlo, y pocas horas antes me dijeron que las condiciones por las que había sido invitado habían cambiado. Consideré que la Generalidad, como máxima institución de nuestro país, como Cataluña, quedaba en un segundo orden y preferí que estuviera representada por un consejero".

El presidente autonómico ha insistido en que, de haber asistido al acto sin presidirlo, se habría creado "un precedente", algo a lo que no estaba dispuesto. "No lo hice molesto, no fue un golpe encima de la mesa", ha añadido para relativizar lo ocurrido.

Mas ha subrayado que el presidente de la Generalidad es quien debe presidir cualquier acto en Cataluña, a menos que esté "el Rey, la Casa Real, el presidente del Gobierno, o el presidente del Senado o el del Congreso".

En un tono más contundente se ha pronunciado el consejero de la Presidencia y portavoz de la Generalidad, Francesc Homs, que ha considerado que, de haber sentado ese precedente, "nos irían arrinconando cada vez más".