El líder de ERC, Oriol Junqueras

El líder de ERC, Oriol Junqueras

Política

Lluvia de críticas contra Junqueras tras amenazar con "parar la economía catalana"

Todos los partidos catalanes excepto ICV-EUiA y la CUP han cargado contra las polémicas palabras del líder de ERC, en que este advertía de una posible huelga general prolongada como arma de presión para poder celebrar un referéndum para la independencia. Hasta el punto de que el propio Junqueras ha rebajado el tono.

14 noviembre, 2013 17:26

El presidente de ERC, Oriol Junqueras, se ha ganado las críticas de casi todo el resto de formaciones el Parlamento autonómico. Todos, excepto los dos teóricamente situados más a la izquierda, ICV-EUiA y la CUP. Por lo tanto, también le han criticado sus aliados de CDC. Y todo ello, por su amenaza de "parar la economía catalana una semana" para presionar al Gobierno para que facilite un referéndum independentista. Después de la polvareda levantada, Junqueras ha matizado, asegurando que no hablaba de una huelga. Pero no ha rectificado el fondo de su mensaje, asegurando que los independentistas "no se rendirán".

El líder de UDC y portavoz de CiU en el Congreso, Josep Antoni Duran i Lleida, no ha dejado pasar la oportunidad de criticar al dirigente independentista. En una entrevista en Catalunya Ràdio esta mañana, Duran ha opinado que la propuesta de Junqueras "no es afortunada", y que "no tiene cuatro dedos de frente".

El dirigente democristiano, a la vez defensor de una tercera vía que no implique la independencia de Cataluña, y condicionado por el pacto de gobernabilidad entre CiU y ERC, que fija que se tiene que celebrar un referéndum independentista, se ha centrado sobre todo en las formas. Ha explicado que Bruselas es "el peor lugar para expresar este lenguaje", y ha comparado el tono de Junqueras con el que empleó el diputado autonómico de la CUP David Fernández durante la comparecencia de la ex presidente de Bankia Rodrigo Rato en el Parlamento autonómico, y que Duran también había criticado.

Sánchez-Camacho y Cañas, los más duros

Mucho más duro ha sido el portavoz parlamentario de Ciudadanos, Jordi Cañas, que ha considerado las palabras de Junqueras como un "chantaje a la democracia española". Cañas ha instado al Gobierno a "no claudicar" ante las "amenazas" de los independentistas, y a marcar los "límites infranqueables" de lo que se tiene que hacer y no en política. Y ha añadido que "la democracia española no puede arrodillarse ante el chantaje de los separatistas".

"Se ha quitado la careta". Así se ha referido a Junqueras la presidenta del PP catalán, Alicia Sánchez-Camacho. Ha razonado que Cataluña "no se puede permitir un político irresponsable e insensato que sea capaz de paralizar la economía catalana sólo para conseguir su objetivo de la independencia", ha opinado Sánchez-Camacho, que cree que Junqueras ha "desprestigiado" la imagen de Cataluña con sus afirmaciones.

"Parar la economía significaría más crisis y más paro", ha alertado Sánchez-Camacho, que ha calificado al dirigente de ERC de "kamikaze". Además, la líder popular ha aprovechado para atacar al gran aliado de Junqueras, cuando ha pedido al presidente de la Generalidad y líder de CiU, Artur Mas, que lo desautorice.

Puig (CDC) dice que no se puede parar "ni dos horas"

Y de hecho, algunas de las primeras críticas a Junqueras llegaron desde CDC y desde el Gobierno autonómico. "Es imposible parar la economía catalana, ni dos horas", dijo ya ayer martes el consejero de Empresa y Trabajo, Felip Puig, que ha atribuido las palabras de Junqueras a una "escalada de radicalidad verbal".

"Lo que la economía catalana necesita es continuar trabajando todavía más, con más intensidad", ha añadido Puig, razonando que el trabajo es "lo que nos dará la fortaleza para poder superar cualquier reto".

"Parece que esté en huelga de razón", dijo, también ayer, sobre Junqueras el alcalde de Cornellà de Llobregat y secretario de Acción Política del PSC, Antonio Balmón. "Desgraciadamente, la economía está parada", explicó, argumentando que "la poca economía que funciona" lo hace "a pesar de la insensatez del señor Junqueras".

Finalmente, Balmon, recomendó a Junqueras "calma" y "paciencia", así como que prescinda de declaraciones más propias de un "mesías" que de un "político realista".

Junqueras matiza

También ha recibido críticas Junqueras por parte de uno de los actores en teoría más perjudicados por una posible huelga, la patronal. A pesar de que más relativas que las que han lanzado los políticos. El presidente de la CEOE, Juan Rosell, ha interpretado las palabras de Junqueras como un planteamiento "teórico, en clave política". Rosell ha relativizado la propuesta de Junqueras es "poco realista", y ha considerado que no hay que tenerla en cuenta.

El causante de todo el ajetreo, Junqueras, ha matizado esta mañana sus palabras. A pesar de que todo el mundo entendió en un primer momento que, cuando hablaba de "parar la economía una semana" aludía a algún tipo de huelga, hoy lo ha negado, explicando que no empleó el término "huelga" en ningún momento de su intervención de ayer en Bruselas.

"Hay cosas que a veces no hace falta hacerlas, lo único es que quede claro que podríamos llegarlas a hacer", ha razonado, matizando su amenaza. Sin embargo, y con huelga o sin huelga, se ha reafirmado en el fondo de su mensaje, cuando ha proclamado que "si el Gobierno español pone muchas trabas para poder votar, los catalanes no se rendirán".