La presidenta de Junts, Laura Borràs, que acudirá sola a su juicio por corrupción / EUROPA PRESS

La presidenta de Junts, Laura Borràs, que acudirá sola a su juicio por corrupción / EUROPA PRESS

Política

Laura Borràs (JxCat) considera un "juicio político" la causa por fraccionamiento de contratos

La presidenta de Junts per Catalunya, acusada de adjudicar a dedo 18 contratos públicos a un amigo, espera "un veredicto de absolución"

18 noviembre, 2022 18:19

Laura Borràs (JxCat) considera "un juicio político" la causa por el presunto fraccionamiento de 18 contratos públicos a un amigo. La expresidenta del Parlament catalán asegura que defenderá su "inocencia" y su gestión al frente de la Institució de les Lletres Catalanes y ha agregado que, con esta "convicción", solo puede esperar "un veredicto de absolución".

El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) juzgará a Borràs del 10 de febrero al 1 de marzo de 2023, acusada de haber adjudicado a dedo a un amigo 18 contratos menores entre 2013 y 2017, cuando dirigía la Institució de les Lletres Catalanes (ILC).

"Irregularidades"

En un vídeo distribuido por su partido, JxCat, Borràs insiste en su discurso habitual de que se trata de un "juicio político" que, según ella, ha tenido "irregularidades" que se han mantenido "hasta el momento actual".

"El Tribunal Supremo ha señalado la falta de imparcialidad de dos de los magistrados, que son los de mi causa", dice Borràs, en referencia al presidente del TSJC Jesús María Barrientos.

Apoyo de Puigdemont

El expresidente de la Generalitat fugado de la justicia por el procés, Carles Puigdemont, ha trasladado su "apoyo" a Borràs en un mensaje en su cuenta de Twitter.

"La presidenta Laura Borràs no tendrá un juicio justo. Toda la causa está empapada de prejuicios políticos. Por eso no ha bajado nunca los brazos, y por eso seguramente la persiguen más motivados", asegura Puigdemont.

Fiscalía pide seis años de cárcel

La expresidenta del Parlament catalán está acusada por el presunto fraccionamiento de 18 contratos públicos por un importe total de 259.863 euros para adjudicárselos a su amigo Isaías Herrero, cuyo objetivo era la creación y gestión de varias webs de la ILC, entidad dependiente de la Generalitat de la cual Borràs fue directora.

El caso salió a la luz de forma casi fortuita, al tener acceso los Mossos d'Esquadra a unos correos electrónicos de Herrero, que en su momento estaba siendo investigado por otro asunto distinto de tráfico de drogas y falsificación de billetes. En algunos de sus e-mails aparecía el nombre de Borràs, incluso como interlocutora, y en ellos se debatía sobre cómo esquivar el concurso público para obtener la adjudicación a dedo de dichos contratos informáticos de la ILC.