Diputados debatiendo en la última sesión plenaria del Parlament de Cataluña de 2020 / EUROPA PRESS

Diputados debatiendo en la última sesión plenaria del Parlament de Cataluña de 2020 / EUROPA PRESS

Política

Los independentistas se quedan solos con la exigencia de una ley de amnistía al Congreso

PSC, Ciudadanos y PP votan en contra al tiempo que recuerdan que España no es ninguna dictadura; los comuns se abstienen

18 diciembre, 2020 17:36

El Parlament ha aprobado este viernes una propuesta de resolución conjunta presentada por JxCat, ERC y la CUP --y aprobada únicamente por ellos-- para instar al Congreso a aprobar una ley de amnistía por todos los actos "de intencionalidad política" vinculados, según ellos, "a la lucha democrática por la autodeterminación de Cataluña", que sería aplicable a partir del 1 de enero de 2013.

En plena crisis sanitaria, social y económica por el coronavirus, este ha sido uno de los puntos destacados del último pleno de la legislatura catalana. La iniciativa en cuestión ha prosperado con el único apoyo de los tres partidos independentistas, la abstención de los comuns --que había presentado enmiendas al texto-- y el voto en contra de PSC-Units, Cs y PP.

Sedición, malversación y prevaricación

La propuesta defiende que la amnistía debe conllevar la "extinción de cualquier tipo de responsabilidad penal y administrativa, incluida la del Tribunal de Cuentas", en delitos "perseguidos penalmente o administrativa desde el 1 de enero de 2013".

En este sentido, detalla los delitos que debería incluir la amnistía: rebelión y sedición; malversación de caudales públicos cuando esté en concurso con el delito de sedición, y los delitos de prevaricación, falsedad, malversación de caudales públicos, desobediencia o revelación de secretos, así como los delitos vinculados a la organización del 9N de 2014 o el 1-O de 2017.

Los comuns piden reformar la sedición

También se incorporarían los actos de expresión y opinión que hayan sido valorados como delitos de incitación al odio vinculados al denominado conflicto catalán; los delitos contra el orden público "cometidos en el marco de la lucha democrática por la autodeterminación y/o de las protestas y acciones de crítica de la actuación de las autoridades gubernativas y/o jurisdiccionales sobre el conflicto" en Cataluña, y otros actos que hayan sido mediados por la realización de los actos amnistiados.

Desde los comuns, Lucas Ferro ha argumentado la abstención de su grupo porque, en su opinión, no se puede renunciar a vías como la reforma del delito de sedición del Código Penal y a los indultos, y ha llamado a los partidos independentistas a ser capaces de dialogar y llegar a un acuerdo: "No compartimos que las propuestas antirrepresivas compitan entre ellas", ha dicho.

Los argumentos de la oposición

El socialista Ferran Pedret (PSC) también ha defendido la vía del diálogo, la negociación y el pacto para alcanzar una solución política que genere consenso entre los catalanes y pueda asumir el conjunto del resto de españoles, y tras ver connotaciones electorales en que JxCat, ERC y la CUP hayan llevado la propuesta por la amnistía en el último pleno de la legislatura, ha dejado claro que a la mitad de catalanes que no son independentistas "no se les puede pedir el olvido", más teniendo en cuenta que la ciudadanía no nacionalista no se explica cómo los políticos presos insisten en que "lo volverían a hacer".

Tras lamentar la "crispación" existente en Cataluña, Nacho Martín Blanco (Cs) ha llamado a generar un clima y un debate público más constructivo en la próxima legislatura porque, en su opinión, seguir con el debate independentista genera división y no permitirá gestionar la crisis sanitaria del coronavirus, y sus consecuencias económicas y sociales, con las garantías que se necesita.

El líder del PP catalán, Alejandro Fernández, ha recordado que la iniciativa es inviable, entre otras razones, porque España no es ninguna dictadura. Y ha acusado a los independentistas de aplicar "un realismo mágico populista", también cuando abordan cuestiones como la amnistía, subrayando que la malversación y la sedición no son ideologías políticas.

Inmovilismo secesionista

Desde JxCat, el vicepresidente primero del Parlament, Josep Costa, ha reconocido que saben que el Estado "no aceptará ninguna amnistía, y si lo hiciera, al día siguiente no terminaría la represión", tras no percibir ningún cambio en el Gobierno del PSOE y Unidas Podemos en relación al "conflicto catalán", que cree que solo se podrá solucionar con la independencia.

El diputado Ferran Civit (ERC) ha pedido "empatía, amnistía y política" a la hora de defender la propuesta de resolución porque, a su juicio, el "conflicto" sólo se puede resolver políticamente.

Natàlia Sànchez, de la CUP, ha advertido de que seguirán con su "lucha" pese a que no se apruebe la amnistía --"no es un punto final"--, y ha replicado a los comuns que la reforma del delito de sedición es una solución parcial para que salgan los presos independentistas, pero no una opción global para poder hacer, según ella, política en libertad.