El Govern ve el rechazo de Junts a los presupuestos como “una táctica política”

La consellera de la Presidencia de la Generalitat de Cataluña, Laura Vilagrà, ve la posible enmienda de Junts per Catalunya a los presupuestos como una “táctica política”. En una entrevista que ha concedido este lunes por la mañana a El Matí, de Catalunya Ràdio, la representante del ejecutivo catalán ha afirmado que este rechazo por parte de la formación independentista “estaría poco justificado”.

En su intervención, Vilagrà también ha manifestado que “esta legislatura va de autodeterminación y amnistía” y que el president Pere Aragonès “trabaja por la independencia” del territorio, aún teniendo en cuenta las declaraciones del Gobierno español en referencia al fin del procés. “En su momento no parecían posibles los indultos o la reforma de la sedición. Se dicen muchas cosas en política, pero se están consiguiendo otras muchas en las negociaciones y eso es innegable”, ha asegurado. 

"Responsabilidad y solvencia"

La que fue alcaldesa de Sampedor entre 2003 y 2015 ha negado rotundamente que el acuerdo de los presupuestos entre ERC y el PSC suponga el fin de la mayoría independentista, tal como ha señalado Junts en varias de sus comparecencias tras el pacto. Ha mantenido que este se ha cerrado “por responsabilidad y solvencia”, ya que de no haberlo hecho “se habrían perdido más de 1.500 millones de euros que no se hubieran podido recuperar en la prórroga”, lo que hubiera considerado “un flaco favor a la ciudadanía, las universidades y a la economía productiva”. 

El principal reto para el Govern ahora mismo, según Vilagrà, es ejecutar las cuentas de una forma “ágil y rápida” para dar respuesta a los problemas de los ciudadanos. La política ha respondido a las acusaciones de Junts de querer hacer volver el tripartito recordando que este partido y el PSC se han puesto de acuerdo en el pasado en multitud de asuntos territoriales y de movilidad y que los presupuestos incluyen el 79% de las propuestas del partido presidido por Albert Batet en el Parlament.

El 'president' del Govern de Cataluña, Pere Aragonès (i), con Salvador Illa, líder de la oposición y primer secretario del PSC / EP

“Convencida” de que Puigdemont no volverá en 2023

La consellera ha hablado de la sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) en referencia a los líderes fugados del procés y ha apuntado que “todas las personas que están pendientes de juicio están en una situación mejor a la que tenían anteriormente”. También ha declarado que está “convencida” de que el expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont no volverá extraditado a España antes de que termine el año. 

Además, ha afirmado que, aunque las últimas semanas se han destinado a cerrar la cuestión de los presupuestos, el ejecutivo trabaja para “encontrar sinergias” durante los próximos meses para mejorar la propuesta del Acord de Claredat con el objetivo de llevar a cabo un referéndum pactado con condiciones. “Hasta que no pongamos las urnas no acabaremos con este conflicto político”, ha reiterado Vilagrà. 

El expresidente catalán Carles Puigdemont (c) flanqueado por los 'exconsellers' Clara Ponsatí (i), Lluís Puig (2d) y el abogado Gonzalo Boye (d) / EFE

Contradicciones con la B-40

En lo que se refiere a la luz verde de los presupuestos al proyecto del Cuarto Cinturón aún con el rechazo en el pasado de este por parte del conseller de Territorio Juli Fernández, Vilagrà ha declarado que esta se ha llevado a cabo “por el bien común” y que “a veces en la vida se tienen que asumir contradicciones”.

Respecto a la ambigüedad del proyecto en el aeropuerto de Barcelona-El Prat (el acuerdo no habla de ampliación de la infraestructura, sino de "aumentar su capacidad"), la consellera ha asegurado que “sin tocar nada debería poder llegar a ser un hub internacional”. Las prioridades del Govern estarían centradas en tener más rutas de punto a punto, en la velocidad y en la gobernanza de las instalaciones aeroportuarias, que, según Vilagrà, hasta ahora ha estado “muy centralizada”. Todo ello, afirma, teniendo en cuenta “el respeto a la biodiversidad y a los vecinos del entorno”. La política no ha especificado fechas para la reforma, pero sostiene que el Govern ya se encuentra trabajando en definir los aspectos técnicos de esta.