El Govern trata de dar una vuelta de tuerca en su intento de meter presión sobre Salvador Illa, ministro de Sanidad del Gobierno y candidato del PSC a las elecciones a la Generalitat. Y, para ello, por segunda jornada consecutiva ha amagado con adelantar el inicio del toque de queda en Cataluña.
Si ayer fue la responsable de Salut, Alba Vergés, quien dejó caer que están estudiando esta posibilidad, este martes ha sido la consejera de Presidencia, Meritxell Budó, la que ha insistido en ello. En la comparecencia ante los medios después del Consejo Ejecutivo de la Generalitat, ha reiterado su visión de que son las autonomías las que están autorizadas a efectuar cualquier modificación para tratar de atajar el avance del coronavirus en sus territorios de referencia
Exhibir músculo
El Gobierno central se opone frontalmente a cualquier modificación de forma unilateral, como ha aprobado el Gobierno de Castilla y León, en manos del PP. Han recordado que el actual decreto de estado de alarma solo contempla modularlo entre las 22:00 horas de la noche y las 7:00 horas de la mañana y que, cualquier cambio en este sentido, requiere de un nuevo documento legal. Y es que se trata de una limitación de un derecho fundamental que se necesita justificar.
Cataluña, con todo, se ha sumado a una reclamaciones sanitarias que han sido criticadas por partidistas. Por ahora, no cambiarán las restricciones vigentes aunque los independentistas aseguran que actuarán "en función de las recomendaciones de las autoridades sanitarias catalanas".
En este sentido se ha manifestado este martes Meritxell Budó. La portavoz del Govern ha explicado que si el Procicat apuesta por adelantarán el toque de queda a las ocho de la tarde, el Ejecutivo catalán efectuará el cambio. "Si nos piden avanzar el confinamiento nocturno, porque esto realmente reduce el impacto de la pandemia, el Govern tomará esta decisión", ha manifestado.
La decisión, esta semana
"Veremos si las autoridades sanitarias nos piden adelantarlo y si avanzarlo a las 20.00 horas tendría realmente como resultado la disminución del riesgo de transmisión del virus", ha puntualizado.
Budó ha recordado que las actuales restricciones están en vigor hasta el 24 de enero y que entre mañana miércoles y el viernes decidirán si se deben "flexibilizar, mantener o reforzar con medidas adicionales". "En los próximos días y horas valoraremos cuál es el escenario", ha apuntado. Todo ello, en medio de la crisis desatada por la suspensión temporal del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) del decreto que anulaba las elecciones del 14F por la emergencia sanitaria y anunciaba que tenía la intención de convocarlas el 30M. Por ahora, el Govern deberá poner urnas en febrero.