Los dirigentes de la Generalitat han aplazado a última hora, y en contra de lo esperado, su comparecencia ante los medios de comunicación para anunciar las nuevas medidas que se adoptarán en Cataluña para frenar la escalada de contagios de coronavirus.
La rueda de prensa, en la que en principio estaba previsto que intervinieran el vicepresidente Pere Aragonès (ERC) y la consellera Meritxell Budó (JxCat), se ha aplazado a este viernes.
Discrepancias internas
Según publica El Nacional citando fuentes del Ejecutivo autonómico, la razón del aplazamiento han sido las discrepancias entre los dos socios del Govern independentista en este asunto. Así, mientras los posconvergentes intentan minimizar los efectos de las nuevas restricciones --al afectar más a las consejerías que están en sus manos--, los de ERC --de quienes depende la de Salud-- apuestan por adoptar medidas más contundentes.
Así, entre dichas diferencias radicarían la adopción de mayores restricciones en bares y restaurantes y en el ámbito de la Cultura.
"Medidas quirúrgicas"
Sin embargo, según TV3, fuentes de la Generalitat aseguran que la propuesta que se baraja no prevé volver a la fase previa al primer tramo de la desescalada, y sólo se estarían discutiendo "medidas quirúrgicas".
La anulación de la comparecencia pública de los responsables del Govern se ha producido este jueves por la noche, tras varias horas de reunión del Procicat para consensuar las medidas a aplicar, apenas un mes después de haberse empezado a implementar el plan de desescalada el pasado 23 de noviembre.
Límites a la movilidad
A la espera de conocer los detalles, todo indica que Cataluña incrementará las restricciones a la movilidad este mismo fin de semana, instaurando probablemente el confinamiento perimetral municipal.
Asimismo, Cataluña mantendrá el confinamiento perimetral de la autonomía, salvo en el caso de viajes para reuniones familiares, y con la recomendación de que todo el movimiento de personas que se pueda evitar se deje de hacer. Un detalle que había avanzado la consellera de Salud, Alba Vergés, en una rueda de prensa telemática junto con el vicepresidente Pere Aragonès.
El cierre de bares y restaurantes, en el aire
"No vamos nada bien, vuelve a haber una escalada", admitió Aragonès, evitando adelantar si estas medidas implicarían el cierre de bares y restaurantes.
La hostelería y la restauración catalana han advertido este jueves de que no podrán asumir un nuevo cierre e incluso han dicho que se plantean demandar al Govern "por inacción" y en defensa del sector, ya que éste "no puede admitir" que desde el primer momento se le señale como culpable de los rebrotes de la pandemia.
La Navidad, una incógnita
A día de hoy, queda por ver todavía cómo quedará el plan de Navidad, que en principio autoriza la libre circulación los 25, 26 y 1 de enero y establecía un máximo de 10 personas, con un tope de dos grupos burbuja, en las comidas familiares. Una cifra que ahora podría reducirse, a pesar del rechazo de la Generalitat a la propuesta inicial del Gobierno, que ya fijaba reuniones de un máximo de seis personas hace un par de semanas.
Y es que la velocidad de propagación del coronavirus sigue subiendo en Cataluña, con 30 fallecidos más notificados en las últimas 24 horas, lo que eleva el total desde el inicio de la pandemia a 16.524 personas. Este jueves, la Rt fue de 1,34 --el miércoles era de 1,22-- y hubo 2.269 nuevos contagios confirmados.
Según los datos del Departamento de Salud, el riesgo de rebrote (EPG), que mide el índice de crecimiento potencial de la epidemia, también ha aumentado hasta los 274 puntos tras los 245 del miércoles, mientras la presión en los hospitales empieza a aumentar, aunque por ahora no en las UCI.