El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy (i), y el exlíder del PP catalán, Josep Piqué (d), en una imagen de archivo / EFE

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy (i), y el exlíder del PP catalán, Josep Piqué (d), en una imagen de archivo / EFE

Política

El PP catalán recuerda el fracaso de Piqué y admite malestar con Santamaría

La ejecutiva rechaza el giro moderado que propone un sector del partido ante la incomodidad generada por la 'operación dialogo' en la militancia

30 diciembre, 2016 00:00

El giro moderado de Piqué no salió bien porque quiso convertir el partido en CDC sin serlo”. Esta es la respuesta que un dirigente del PP catalán, que forma parte del núcleo duro de Xavier García Albiol, da a la propuesta de un sector de la militancia. “Ponerle un bozal a Albiol no funcionará”, avisa.

Tal como publicó ayer Crónica Global, un grupo de afiliados apuestan por un nuevo discurso, más próximo al catalanismo que en su día practicó el expresidente del PPC, Josep Piqué, como vía para salir de una posición marginal, combatir el desafío independentista y lograr entre 35 y 38 diputados de aquí a cuatro años.

Sin embargo, la actual ejecutiva del partido rechaza ese cambio. “Ya lo hemos vivido, no es una novedad. No tiene sentido reeditar algo que ya pasó y salió mal”, insiste la misma fuente. Entre otras cosas, por el intento de emular el catalanismo de Convergència, que por aquel entonces --el exministro de Asuntos Exteriores presidió el PPC entre 2003 y 2007-- estaba lejos de abrazar el independentismo.

La rectificación de la vicepresidenta

Aseguran que esa propuesta de ocupar un espacio de centro-derecha mediante un discurso más moderado es apoyado por un sector minoritario de la militancia, molesta con la puesta en escena de la llamada operación diálogo protagonizada por la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría, apoyada en el nuevo delegado del Gobierno en Cataluña, Enric Millo. La forma en que Santamaría ungió a Millo --"será mis ojos y mis oídos", dijo-- no agradó a la ejecutiva popular y así se lo hicieron saber. Posteriormente, Santamaría matizaría sus palabras y destacaría el papel de quien, sin duda, será investido presidente del PP catalán en el congreso que el partido celebrará antes de Semana Santa.

Desde la ejecutiva, advierten de que, durante la época de Piqué, "llegamos incluso a esconder la bandera española, lo que allanó el terreno a Ciudadanos. Tenemos en Cataluña unos 130.000 votos fieles que no podemos perder con un cambio de discurso", dice esta fuente. Mientras los defensores de la moderación creen que C's ha virado hacia un espacio de centro-izquierda, lo que puede aprovechar el PPC para ocupar el centro-derecha, la actual cúpula popular teme que precisamente ese giro al estilo Piqué dé alas a Ciudadanos.

En cuestión de relatos, será muy determinante la permanencia o no al frente de la secretaría general del PP de María Dolores de Cospedal. El equipo de Albiol desea su continuidad, pero es poco probable, ya que Defensa es uno de los ministerios “de Estado” junto a Interior, Justicia y Asuntos Exteriores, que no puede verse contaminado por las tribulaciones del partido.

Hay nervios congresuales, admite la dirección popular. Y también una defensa del discurso contundente, pero cercano, de su líder. “Haciendo territorio, es el mejor”, dicen.