El 'conseller' de Interior, Joan Ignasi Elena / PARLAMENT DE CATALUNYA

El 'conseller' de Interior, Joan Ignasi Elena / PARLAMENT DE CATALUNYA

Política

El consejero Elena se pone al servicio de la CUP en la comisión de secretos del Parlament

El Govern acepta comparecer en el órgano parlamentario para dar explicaciones sobre sus gastos y recursos reservados destinados a la infiltración y espionaje en movimientos sociales, como solicitaron

31 marzo, 2023 00:00

La Consejería de Interior de la Generalitat de Cataluña se mantiene al margen de la ruptura de relaciones entre el Govern y la CUP. A pesar de que los antisistema decidieron hace meses abandonar a Pere Aragonès a su suerte, la Comisión de Materias Secretas y Reservadas del Parlament acaba de ser escenario de las complicidades entre el conseller Joan Ignasi Elena y los cupaires.

Este órgano parlamentario, creado por ley, controla los créditos destinados a gastos reservados de la Generalitat. Es un trasunto de la Comisión de Secretos Oficiales del Congreso de los Diputados y, como su nombre indica, sus sesiones no son públicas. Sin embargo, según ha podido saber Crónica Global, la CUP instó la comparecencia del consejero Elena, del jefe de la Comisaría General de Información y del director general de la policía autonómica para que informaran de los gastos y recursos reservados destinados a la infiltración y espionaje en movimientos sociales, organizaciones populares y la izquierda independentista, y sobre la colaboración con los cuerpos de seguridad del Estado.

La Consejería de Interior guarda un mutismo absoluto respecto a estas explicaciones, que tienen lugar después de que, a principios del mes de febrero, cinco mujeres vinculadas al movimiento okupa y anticapitalista presentaran una querella en los juzgados de Barcelona contra un policía nacional que, según aseguran, las utilizó mientras estuvo supuestamente infiltrado en movimientos sociales y sindicales de la capital catalana, entre los años 2020 y 2022, y con las que mantuvo relaciones sexuales.

"Interés del Govern"

Los antisistema solicitaron la comparecencia de los tres miembros de la cúpula policial catalana. Algunos miembros de la oposición que forman parte de la citada Comisión de Materias Secretas expresaron su rechazo, al entender que existen otros temas prioritarios por los que el consejero Elena debería dar explicaciones en el Parlament. Sin embargo, el propio responsable de Interior habría expresado “el interés del Govern” en asistir a esa sesión solicitada y esclarecer las dudas que la actuación del citado infiltrado puede generar respecto a la actuación de los Mossos d’Esquadra, según afirman fuentes parlamentarias.

Integrantes de Arran, 'cachorros' de la CUP,  se concentran ante la Consejería de Interior / ARRAN

Integrantes de Arran, 'cachorros' de la CUP, se concentran ante la Consejería de Interior / ARRAN

Las comparecencias han sido interpretadas por los grupos de la oposición como un nuevo ejemplo de que la CUP marca el paso a la Conselleria de Interior, a pesar de que esta formación rompió relaciones con el Govern hace meses. Tras apoyar la investidura de Aragonès, la CUP rechazó apoyar los presupuestos de la Generalitat, por lo que el president se sintió liberado de someterse a una cuestión de confianza en el ecuador de la legislatura, tal como se había comprometido con los antisistema.

Marcaje de los antisistema

Pero son varios los ejemplos que demuestran ese marcaje de los anticapitalistas en las políticas de seguridad catalanas. Por ejemplo "la auditoría más grande del modelo policial" --como definió la diputada de la CUP, Dolors Sabater-- que la Consejería de Interior nunca llegó a hacer, o los trabajos de una comisión de estudio del Parlament, fruto del pacto de investidura entre ERC y los antisistema, con vistas a una remodelación del modelo policial catalán.

El traslado de los servicios jurídicos de la Consejería de Interior a la de Presidencia con la finalidad de evitar que el Govern entre en colisión con el activismo independentista en procesos donde los agentes han sufrido agresiones ejerciendo sus tareas de seguridad es otro de los logros de los anstisistema, unido a la constitución de una nueva división de escoltas, que no depende de los Mossos d’Esquadra, sino de un órgano político como es la dirección general de la Policía. Una división que engloba a la polémica guardia pretoriana de Quim Torra que, lejos de ser eliminada, quedó subsumida en este nuevo grupo.