El Tribunal Supremo ha sancionado a Carles Mundó con una multa de 10 meses, con una cuota diaria de 200 euros, con responsabilidad personal subsidiaria de un día por cada dos cuotas no satisfechas, e inhabilitación especial para el ejercicio de cargos públicos electivos, ya sean de ámbito estatal autonómico o local, así como para el ejercicio de funciones de gobierno en el ámbito estatal, autonómico o local, por tiempo de 1 año y 8 meses.
Le considera culpable de un delito de desobediencia, al igual que a Santi Vila y a Meritxell Borràs.
