Francesc Homs, líder de CDC en el Congreso de los Diputados en una imagen de archivo en el Congreso.

Francesc Homs, líder de CDC en el Congreso de los Diputados en una imagen de archivo en el Congreso.

Política

CDC se resiste a ir al ‘gallinero’ del Congreso

El Congreso aplaza la decisión sobre la distribución de los escaños por falta de acuerdo, ya que ERC, Podemos y el Grupo Mixto pelean por los sillones vacantes

9 agosto, 2016 14:23

El inicio de la XII Legislatura en España marca un nuevo precedente. La Mesa del Congreso ha anunciado este martes que se toma unos días más para distribuir los escaños en el hemiciclo debido a la falta de acuerdo que existe entre los grupos políticos. El gran problema es cómo cubrir las sillas centrales de la Cámara Baja --de gran visibilidad-- que tradicionalmente había ocupado Convergència Democràtica de Catalunya (CDC).

Los ocho diputados nacionalistas se resisten a abandonarlos y desplazarse hasta el gallinero, un lugar con poca visibilidad pero donde se sentaron desde el inicio de la democracia los miembros del Grupo Mixto. Allí se integrarán después de no haber alcanzado la representatividad mínima que marca la ley para disponer de grupo propio.

Pelea de Podemos y ERC

Pero lo que más ha dolido en algunos sectores de CDC es la discusión que se ha iniciado en la Cámara por quedarse con sus escaños. Los quieren tanto Podemos como ERC, los socios de Gobierno en Cataluña que les cerraron la puerta en las narices al plantear integrarse (y repartirse la asignación) en un único grupo que levantara la bandera del independentismo en el Congreso.

También los ha pedido el Grupo Mixto. Alega que al ser el cuarto más numeroso de la Cámara española debe mantener las sillas centrales. Cabe recordar que allí se integra tanto CDC como Compromís, que concurrió a las elecciones en confluencia con Podemos en la Comunidad Valenciana pero que decidieron tener su propia voz en el Congreso.

Otra cuestión es quién se sentaría finalmente en esas sillas si la Mesa decidiera asignárselas.

Pastor elude tomar una decisión

Ana Pastor, la presidenta de la Cámara Baja española, ha evitado tomar una decisión salomónica. Ha indicado que su propósito es que este tipo de decisiones se adopten siempre por unanimidad y se ha dado más tiempo para alcanzar el acuerdo.

Incluso se ha lavado las manos. Ha dejado la negociación en manos de los vicepresidentes de la Mesa, encabezados por el diputado de Ciudadanos Nacho Prendes. Sin el pacto que intenta forzar Pastor no se podrán celebrar las sesiones plenarias.

Diputación Permanente

Lo que sí ha acordado la Mesa del Congreso es el reparto de despachos y la ubicación de los grupos en las distintas dependencias parlamentarias, así como el número de asistentes que corresponde a cada formación (casi 0,8 por diputado).

También se ha definido la composición de la Diputación Permanente, el órgano que sustituye el Pleno del Congreso en los periodos no ordinarios de sesiones como este mes de agosto. Falta el visto bueno de la Junta de Portavoces, aunque se espera que sea un trámite sin más.