El presidente de la Asociación Profesional de la Magistratura (AMP) en Cataluña, Pablo Baró / CONVERSES DE COPE CATALUNYA I ANDORRA

El presidente de la Asociación Profesional de la Magistratura (AMP) en Cataluña, Pablo Baró / CONVERSES DE COPE CATALUNYA I ANDORRA

Política

Alertan del "gran error" de derogar la sedición: la Constitución puede quedar "desprotegida"

Pablo Baró, presidente de la APM en Cataluña, advierte de que "nunca se debe legislar para casos concretos" y que "la próxima vez no podremos hacer nada" para frenar un golpe como el del 'procés'

26 noviembre, 2022 16:30

La derogación del delito de sedición impulsada por el Gobierno de PSOE y Unidas Podemos, y apoyada en el Congreso por algunos de sus socios externos como ERC y Bildu, puede desproteger a la Constitución y dejar al Estado sin herramientas para combatir un golpe como el protagonizado por los dirigentes secesionistas catalanes en 2017. Así lo advierte el presidente de la Asociación Profesional de la Magistratura (AMP) en Cataluña, Pablo Baró, quien señala además que, con esta reforma del Código Penal, el expresidente de la Generalitat fugado Carles Puigdemont podría "volver antes si no quiere enfrentarse al juicio"

En una entrevista en el programa Converses de Cope Catalunya i Andorra este sábado, Baró ha señalado que la derogación de la sedición --y su sustitución por otro delito de desórdenes públicos agravados, con penas menores-- supone un gran error, ya que "nunca se debe legislar para casos concretos en materia de derecho penal", en alusión a los dirigentes que fueron condenados por dicho delito por el referéndum ilegal y la declaración unilateral de independencia de 2017.

Y es que, según ha apuntado, desde 2013 solo ha habido 31 condenados por sedición, y llevar a cabo una reforma de ese tipo para esos “casos concretos” supone, a su juicio, que “salten por los aires los principios de derecho penal”.

"No es normal legislar contra resoluciones de los jueces"

En opinión del presidente de esta asociación de jueces --mayoritaria en España--, con esta medida se "cambia el relato de lo que sucedió en 2017" a través del Boletín Oficial del Estado. Y recuerda que no es normal legislar directamente contra resoluciones de los jueces.

Según Baró, si sale adelante esta reforma del Código Penal --algo que, previsiblemente, ocurrirá antes de que acabe este año tras haber obtenido el beneplácito en el Congreso el pasado jueves--, la Constitución puede quedar “desprotegida”. Así, ha recordado que en 2017, a raíz de la celebración del referéndum ilegal y unilateral de independencia de Cataluña del 1 de octubre de 2017, “el Estado tenía instrumentos”, y “el golpe se paró" por actuación de la Policía y la Guardia Civil y la actuación judicial. “Y si a los jueces les quitas los instrumentos jurídico para evitar este tipo de asuntos, ¿qué haremos la próxima vez? No podremos hacer nada”, advierte Baró.

Puigdemont podrá volver antes

La derogación de la sedición, sustituyéndola por otro delito con penas y plazos de prescripción inferiores, puede conllevar, también, que exdirigentes de la Generalitat fugados como Puigdemont puedan regresar antes, pues sus presuntos delitos de sedición prescribirán antes. “Inevitablemente bajan las penas a imponer y los plazos prescriptivos”, afirma Baró, con lo que el mandatario de Junts per Catalunya “podrá volver antes si no quiere enfrentarse al juicio”.

El Govern de Carles Puigdemont y los exconsejeros presos tras la aprobación de la DUI en el Parlament / EFE

El Govern de Carles Puigdemont y los exconsejeros presos tras la aprobación de la DUI en el Parlament / EFE

Ley del 'solo sí es sí'

Por lo que respecta a la llamada ley del sólo sí es sí impulsada por el Ministerio de Igualdad del Gobierno, y las rebajas de penas y excarcelaciones de agresores sexuales que ha causado tras su aprobación, el presidente de esta asociación de magistrados ha apuntado que "no se puede imputar a los jueces las deficiencias de una norma", y ha añadido que el Tribunal Supremo puede y debe unificar la doctrina cuando hay criterios dispares, pero no enmendar errores de otros.

Baró lamenta los ataques que están recibiendo los jueces por la aplicación de esta ley, también desde el propio Gobierno: “Es la huida hacia adelante de quien no quiere reconocer sus propios errores”, ha sentenciado. Asimismo, aprecia un intento de “desprestigiar al poder judicial” desde sectores del independentismo, pero también de “cierto sector de la izquierda en todo el territorio nacional”. Unos, afirma, acusan a los jueces de “fascistas”, y otros de “machistas”.