Irreconciliables. ERC y Junts per Catalunya (JxCat) vuelven a airear sus diferencias a cuenta de los presupuestos generales del Estado (PGE). Los neoconvergentes han reprochado a Pere Aragonès que rompiera la unidad independentista y rechazara presentar enmienda a la totalidad de las cuentas de 2022, tal como el partido de Carles Puigdemont hizo. Pero el presidente catalán no se achanta: "En 2006 tuvimos claro que no podíamos aceptar un Estatut recortado" y hoy "muchos" de quienes sí lo defendían "vienen a darnos lecciones de independentismo",
Aragonès ha recordado, en una clara alusión a los herederos de CDC, que en 2006 su partido hizo campaña por el 'no' al "Estatut recortado". En un acto para conmemorar el 90 aniversario de las juventudes de ERC, celebrado esta tarde en Barcelona, Aragonès ha reivindicado la trayectoria independentista de su partido. "La independencia no es una finalidad en sí misma, sino una caja de herramientas" para alcanzar el bienestar y la máxima justicia para los catalanes, ha dicho Aragonès. "En 2006 tuvimos claro que no podíamos aceptar un Estatut recortado" y hoy "muchos" de quienes sí lo defendían "vienen a darnos lecciones de independentismo", ha asegurado.
Agradecimiento a los cachorros de ERC
El president ha agradecido a los cachorros republicanos que "siempre han estado ahí", incluso en "los momentos más complicados de la organización". Desde 1931, pasando por los hechos de 1934, la Guerra Civil o la "larga noche del franquismo", también durante "una transición que dejó olvidadas tantas cosas y a tantos franquistas todavía en muchas posiciones de poder" o, más recientemente, con el presidente del partido, Oriol Junqueras, en la cárcel, y la secretaria general, Marta Rovira, en Suiza para esquivar a la Justicia española.
Igualmente, ha subrayado el papel de las juventudes republicanas para que el 1 de octubre de 2017 se pudiera votar en el referéndum sobre la independencia de Cataluña y ha indicado que para ERC "la justicia social es inseparable de la libertad nacional".
