Ada Colau atribuyó a una "campaña de la derecha" la adquisición de un nuevo coche oficial tipo SUV o todocamino con un precio de más de 47.000 euros. La alcaldesa de Barcelona vio "fake news" y aseguró que el Ayuntamiento está "renovando toda su flota de vehículos de alquiler para sustituirlos por coches eléctricos o híbridos". No es cierto. El Ayuntamiento de Barcelona ha firmado la renovación de los monovolúmenes Seat Alhambra que la transportan a ella y a su equipo para un año más. Uno de ellos, conocido como el tanque por su potencia, incumple la nueva normativa europea anticontaminación. La prórroga de los coches oficiales se suma así a su nuevo Peugeot 3008 Hybrid4: Colau tiene ahora mismo tres coches oficiales a su disposición.

Según la documentación a la que ha accedido este medio, el Ayuntamiento de Barcelona ha firmado una prórroga para un año del alquiler de 19 vehículos que el bipartito de Barcelona en Comú (BComú) y PSC había contratado en 2016. La comisión de gobierno ha dado luz verde a extender el contrato número 366/16 [ver licitación aquí] durante un año por el precio de 84.554,60 euros. Ello da derecho al consistorio a utilizar los 19 coches alquilados a ALD Automotive hasta al 31 de marzo de 2021. La flota incluye los dos Seat Alhambra que utilizan la alcaldesa de Barcelona y su equipo de escoltas.
Colau amplía flota y paga y contamina más
Preguntado por esta renovación de vehículos, el equipo de prensa del Ayuntamiento de Barcelona no ha contestado a los requerimientos informativos de este medio. Fuentes de la oposición municipal sí lo han hecho, recordando que Ada Colau, ahora mismo, cuenta con tres coches oficiales: el despampanante SUV Peugeot 3008 Hybrid4 y los dos monovolúmenes Seat Alhambra. Hasta que reasigne los antiguos a otra área, si es que lo hace. En el plano factual, el equipo de la alcaldesa de Barcelona, que declaró la emergencia climática el 15 de enero, ha ampliado flota de coches municipales, al menos hasta el 31 de marzo de 2021, ya que el nuevo todocamino de la alcaldesa viene en un paquete de 21 vehículos para la Guardia Urbana [ver licitación aquí]. ¿En total? 40 coches, cuando hasta ahora eran 19.

Hay más. Aumentando el número de vehículos del Ayuntamiento, el gobierno de Colau paga más y contamina más. Gasta los citados 84.550,60 euros del año adicional del renting de los 19 vehículos antiguos. Esta cifra se suma al nuevo contrato de los 21 automóviles verdes, que aún no está cerrada. Su valor alcanza el millón de euros. El precio final dependerá del proveedor que gane el concurso público. No menos importante, el gobierno local que lidera BComú contamina más. Lo hace porque no jubila los 19 viejos vehículos de renting a cambio de 21 nuevos, sino que los suma. Hasta 40 automóviles. El Ejecutivo local de Barcelona, que hace de las políticas promedio ambiente su seña de identidad, generará más emisiones con su engrosada flota de coches municipales.
BComú entierra el discuso anticoches oficiales
Hay una derivada política a esta información. Barcelona en Comú, confluencia de izquierdas que aupó a Colau a la alcaldía en 2015, ha enterrado su política contra los coches oficiales. En su plan de choque para gobernar la segunda mayor ciudad española, el partido aseguraba que los vehículos para altos cargos eran un "privilegio innecesario" [ver tuit aquí]. Lo repitieron en mítines y lo incorporaron en su batería de medidas urgentes. Al vencer en los comicios en junio de 2015, Colau trató de dar ejemplo desplazándose en Metro a su puesto de trabajo. No duró. En 2016, el gobierno de la exportavoz de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) ya encargaba su primera remesa de coches oficiales, tal y como avanzó El Nacional.

Tras ello, este medio destapó que la munícipe utilizaba un coche que vulnera a nueva normativa europea 631/2019 de contaminación. El PP en el Ayuntamiento de Barcelona lamentó que la exactivista viajara en un monovolumen de siete plazas de gran potencia y que genera muchas emisiones. Ante ello, Colau y su equipo habrían decidido encargar los nuevos automóviles híbridos, incluido un SUV para la alcaldesa. La propia primera edil lo subrayó en su cuenta de Twitter, criticando la supuesta "campaña de la derecha". Lo que olvidó de decir es que en paralelo al nuevo renting, ampliaba el antiguo. Pasa de 19 a 40 coches municipales, paga más y contamina más, pese a que su número dos, Janet Sanz, teniente de alcalde de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad, aboga por desactivar el sector del automóvil. La munícipe tiene, por ahora, tres coches oficiales. Y dos de ellos son contaminantes. Que hará con ellos hasta marzo de 2021 es una incógnita. Por lo pronto, su gobierno activará tras el estado de alarma las multas a los vehículos viejos para recortar emisiones en Barcelona y su conurbacion. Está por ver si el Ejecutivo local también da ejemplo.