¿Alguien lo había puesto en duda? Ya lo ven. Se van cumpliendo las condiciones que Esquerra Republicana (ERC) impuso para la formación de Gobierno. Una era la libertad de los presos. Pues ya los ven, por la calle. El último, que es el primero, Oriol Junqueras, ya está de paseo por la calle. Ha ido a dar clase en la universidad de Vic-Universidad de la Catalunya Central  (UVic-UCC).  Para “enseñar y aprender” ha dicho. Seis horas libre durante tres días a la semana. Así se empieza. Esto marcha. Y, naturalmente, el Gobierno “no se pronuncia” y “respeta” las decisiones de prisiones. ¡Toma ya! Cava y en botella. Podéis beber.

Porque la exigencia de ERC se va cumpliendo. Ya son siete de los nueve condenados los que gozan de semilibertad durante unas horas al día. Sólo faltan Josep Rull y Jordi Turull para unirse al grupo. Y todo gracias a la Junta de Tratamiento de Lledoners que ha decidido aplicar el artículo 100.2 del reglamento penitenciario. A los dos ausentes pronto les tocará el turno. La libertad de los presos fue una de las condiciones impuesta a Pedro Sánchez por ERC y asumida por el Gobierno. O no había Gobierno. Y si quiere tener Presupuestos debe cumplir la exigencia de libertad y la mesa de negociación, más las conversaciones sobre el referéndum. Todo claro. Todo se va cumpliendo bajo la atenta mirada del capataz Rufián. Él ya salvó la ‘mesa’ y salvará los Presupuestos. Pero cumpliendo las condiciones.

Lo ha vuelto a destacar el pasado martes en un desayuno informativo de Nueva Economía en Madrid, donde ha reclamado “por razones obvias” que la mesa de diálogo se reúna por segunda vez “antes de la tercera semana de marzo” en el Palau. Dicho queda. Habrá reunión en el Palau, estén ustedes seguros. Porque ERC quiere liderar la próxima etapa de Cataluña y para ello toma decisiones de futuro “tenga los costes que tenga”, como ha recalcado Gabriel Rufián, portavoz de ERC en el Congreso de Diputados. De paso, le mandó un recado al huido Puigdemont al resaltar que “está muy bien que te aplaudan en Perpiñán pero el reto es que lo hagan en Cornellà, en Santa Coloma y en Sabadell”.

En cualquier pueblo de Cataluña. Hay que estar en casa y hacer frente a los problemas diarios de Cataluña. Se terminaron los faroles. Y las creencias divinas y mesiánicas del expresident Carles Puigdemont. Hay que vivir el día a día en Cataluña. Y buscar soluciones. “No sólo con épica y con banderas se saca a la gente del paro o se detiene un desahucio” añadió Rufián. Otro misil a Puigdemont y a Junts per Catalunya.

Con negociaciones se saca a la gente también de prisión. Jordi Cuixart ya pisó la calle. Y ha ido a trabajar a su empresa de diseño de maquinaria industrial. También Joaquim Forn disfrutará de más de 12 horas libres durante cinco días de la semana y Dolors Bassa saldrá a cuidar a su familia durante tres día a la semana. Todos van viendo la luz y la calle. Igual que Jordi Sánchez y Forcadell con el 100.2 en mano. Todo se va ordenando. Todos van disfrutando de la libertad, como exige ERC. Se consigue más con diálogo que con banderas y cortes de carreteras. Ya hay pruebas y ERC las cantará en la próxima campaña electoral catalana.

Tenemos diálogo, de momento. Tenemos a los presos en la calle, por ahora. Tenemos al vicepresidente Segundo, Pablo Manuel Iglesias, alias El Coletas, apoyando al soberanismo catalán para continuar en el Gobierno y apoyando a su compañera y ministra Irene Montero que ha presentado la mayor chapuza que se recuerde de un proyecto de Ley de libertad sexual, un `corta y pega’ de primero de bachiller. Así nos va. Pero quieren que el Gobierno permanezca. Sólo necesitan los Presupuestos. ¿Habrá Presupuestos? ¿Qué opina Rufián? Por mantener el Gobierno harán cualquier cosa. Por conseguir el poder en Cataluña, ERC hará cualquier cosa.

Por si éramos pocos ha aparecido el Coronavirus y el desconcierto es total. Nada previsto, nada ejecutado. Que vendan todo el humo que quieran, pero no hay nada previsto en los hospitales a pesar de los meses que llevamos con la amenaza. Señal de que el Gobierno no funciona. Y con Iglesias de ‘dictador’, menos. Va camino de cumplir la advertencia de Trotski de que el poder en vez de estar en el pueblo pasaría a ser sólo del Secretario General, reflejado aquí por Pablo Iglesias. ¿Va a durar este Gobierno? Muchas voces creen que va a durar poco, por más que Pedro y Pablo se agarren a los cables ardiendo. No quieren desaparecer. Y cuentan con que no hay oposición. Las peleas internas aumentan día a día. La farsa ya no se sostiene.

Pero ERC, por propio interés, lo puede mantener. Con los Presupuestos. Así habrá referéndum, libertad total para los presos y…  ya veremos, pero intento de independencia. Todo se andará. Entre broncas y falsedades. ¡Cuidado! El pueblo está en la calle. Hasta la policía empujó, manifestándose, las paredes del Congreso el pasado martes. Pedro y Pablo no se enteran. Sólo quieren poder y mirarse con desconfianza. Sólo se ven a sí mismos.