Oriol Junqueras fue elegido a dedo por Puigcercós su sucesor en la presidencia de ERC. Puigcercós definía a Junqueras (Diari de Girona, 27/01/2009) como un intelectual. Sin embargo, más que provocar reflexión crítica, que sería lo más esperable de un intelectual, lo que Junqueras afirma en ocasiones causa sorpresa y en ocasiones estupefacción. Puede hacer declaraciones del calibre de las que hizo en el año 2008 en relación al ADN catalán: "En concreto, los catalanes tienen más proximidad genética con los franceses que con los españoles; más con los italianos que con los portugueses; y un poco con los suizos".

Aunque tiene el título de doctor, en diciembre de 2012, en un artículo publicado en El Mundo, Arcadi Espada, hablando de su tesis doctoral, le acusaba de plagio. Entre otras cosas decía: "Un miembro del tribunal que lo juzgó ha dicho que su tesis tiene un número tal vez excesivo de páginas clavaditas a otras que se encuentran en el libro Historia Política y Económica de Cataluña. Siglos XVI al XVIII, de Jaime Carrera Pujal". También de la tesis de Junqueras, Juan Catalán escribió en su blog sobre el rigor metodológico de nuestro intelectual: "Lástima que su magna tesis adolezca de los mismos pecados de su maestro Simon Tarrés (laureado en 2003 con el premio Prat de la Riba del Institut d'Estudis Catalans, por un libro que, digamos, intertextualizó con tesis y trabajos de sus alumnos más aventajados)".

En noviembre de 2013, Oriol Junqueras nos sorprendió a todos con la amenaza desde Bruselas de paralizar la economía de Cataluña si el Gobierno español no nos permitía realizar una consulta sobre si Cataluña ha de independizarse de España: "¿Quién dice que no podríamos parar la economía catalana durante una semana? [...] Los efectos de un parón en la economía catalana se notarían en el conjunto del Estado y podría afectar a la estabilidad de los mercados financieros".

En noviembre de 2013, Junqueras nos sorprendió a todos con la amenaza desde Bruselas de paralizar la economía de Cataluña si el Gobierno español no nos permitía realizar una consulta sobre si Cataluña ha de independizarse de España

El Gobierno de la Generalitat y el resto de partidos rechazaron de forma unánime la propuesta de Junqueras. Josep Antoni Duran Lleida, líder de Unió, le acusó de "no tener dos dedos de frente" y Antonio Balmón, secretario de acción política del PSC lo calificó de "insensato". Las patronales mostraron su incredulidad con la propuesta y miembros de la patronal consultados posteriormente por la prensa mostraron no comprender cómo se podría hacer esto, respondiendo con comentarios de este estilo: "Nos tendría que explicar a qué se refiere. ¿Habla de dejar de pagar impuestos? ¿De un cierre patronal? ¿De que los sindicatos dejen de trabajar?". Eusebi Cima, vicepresidente de Fepime, confesó no saber "cómo se para una economía". Aunque la amenaza le valió todo tipo de críticas, aún en el mes de enero seguía afirmando su convencimiento en un almuerzo con la Asociación Independiente de Jóvenes Empresarios de Cataluña (AIJEC), a pesar de la manifiesta preocupación de estos.

Sabemos que se define como creyente católico, suele participar el Jueves Santo en la procesión del Santísimo Cristo de la Salud y de Nuestra Señora de la Soledad en Sant Vicenç dels Horts e investigó en los archivos secretos del Vaticano mediante "permesso pomeridiano". Sin embargo, nos sorprendió cuando en diciembre de 2013, en un acto organizado por la Fundació Joan Maragall, proclamó textualmente: "Yo, presidente de Esquerra Republicana de Catalunya, hago un llamamiento a que hayan vocaciones". ERC es un partido con bastantes exseminaristas: su anterior líder Àngel Colom, posteriormente en CIU; su antecesor Carod-Rovira o el filósofo Terricabras, y el mismo Junqueras, pero nunca nos hubiésemos imaginado que estuvieran preocupados por la escasez de sacerdotes.

En el libro Las cuentas y los cuentos de la independencia, de Josep Borrell y Joan Llorach, se revela que Oriol Junqueras es un mentiroso, basándose en que en enero de 2014, el entonces alcalde de Sant Vicenç dels Horts y parlamentario, señaló en una conferencia ante jóvenes emprendedores: "Este año pasado tenemos el 3% de los premios extraordinarios de bachillerato [...]. Con 28.000 habitantes tenemos el porcentaje que corresponde a 225.000 habitantes". Cuando los autores del libro contrastaron los datos, comprobaron que ningún estudiante de los que habían obtenido el premio en los últimos cinco años anteriores a las afirmaciones de Junqueras había estudiado en Sant Vicenç dels Horts y en ningún año el 3% de los premiados llegaba a ser un solo estudiante.

¿Confirmamos que es un intelectual, lo tachamos de mentiroso o deducimos que estamos ante alguien que confunde su propia fantasía con la realidad?

En una entrevista realizada en Catalunya Ràdio en octubre de 2014 auguró, emocionado y a punto de llorar, que la independencia de Cataluña era cuestión de pocos meses si se hacían unas elecciones plebiscitarias y que la consulta alternativa del 9N era "perder el tiempo": "Dejemos de hablar y hagámoslo de una vez [la independencia], por favor". Señaló que no había que perderse en "eufemismos" como el de "una declaración sin proclamación" o en "metáforas como la del Estado propio". Se mostró contrario a una reforma constitucional porque les hacen "perder el tiempo". Finalmente, cuando se le preguntó en la misma entrevista si ERC apoyaría los próximos presupuestos catalanes, afirmó convencido que "en este momento no tiene ningún sentido aprobar los presupuestos de una comunidad autónoma, ya que condenan a Cataluña". "Tenemos que aprobar los presupuestos de un país independiente". La realidad es que Mas convocó el 9N y posteriormente elecciones autonómicas a las que llamó plebiscitarias y no ha pasado nada de lo que dijeron ninguno de los dos.

En agosto de 2015, según publicó Eldiario.es, Junqueras aseguró que el proceso de independencia y las políticas de izquierdas son realidades "inseparables". Aunque Junqueras se lo creyera, la realidad le contradice, ya nadie puede negar que las políticas más de derechas que se han hecho en España las iniciaron sus socios de gobierno y han continuado hasta la fecha. También es evidente que la población menos independentista es la que se corresponde con las zonas más obreras, a diferencia del independentismo que se encuentra más localizado entre las clases medias y en las zonas rurales, tradicionalmente más conservadoras.

Ahora, Oriol Junqueras es responsable de las finanzas de la Generalitat, y un año y medio después de asegurar que casi ya éramos independientes acaba de aprobar presupuestos autonómicos, con algún detalle de izquierdas a petición de la CUP y se muere por convocar un referéndum a imagen y semejanza del 9N. Realidades que se contradicen con todo lo que ha ido afirmando a lo largo del tiempo.

La última guinda que corona el pastel son sus declaraciones del 18 de abril, en un almuerzo-debate con el economista Xavier Sala i Martin en las que afirmó que es posible que la Generalitat declare unilateralmente la independencia si el Gobierno central prohíbe la celebración del referéndum. Es decir, no le hace falta consultar a los catalanes, se hace lo que él quiere porque deduce sin base real que ya sabe lo que la mayoría desea. Así mismo, sorprende que piense en organizar algo tan complejo como la independencia, en el caso que no pueda organizar una cosa más sencilla, como es un referéndum. Como pensamiento demuestra una profundidad ejemplar.

¿Confirmamos que es un intelectual, lo tachamos de mentiroso o deducimos que estamos ante alguien que confunde su propia fantasía con la realidad? La verdad es que, si se confirma lo que hasta ahora vaticinan las encuestas, en poco tiempo tendremos un nuevo presidente de Comunidad Autónoma, tocado por una "intelectualidad" difícil de igualar.