La información es un tren que no descansa nunca

Roberto Giménez
2 min

Después de 18 meses de hablar del coronavirus hemos de dejar de hacerlo porque entramos en otro estadio: ahora, el 10% de no vacunados llenan los hospitales europeos. En Austria dicen que los no vacunados no salgan de casa por ser un peligro público...

Así, la información publicada está por otro asuntos políticos, económicos y morales. Los políticos: en Barcelona, que la ERC de Ernest Maragall ha roto con la alcaldesa Ada Colau porque Ada sigue los pasos de su antiguo partido, el socialista.

En Madrid, los populares se hacen la guerra con descaro: el insustancial Pablo Casado tiene celos de la populista Isabel Díaz Ayuso porque Madrid es el centro del mundo, y utiliza al popular alcalde Almeida como pantalla de efecto preventivo.

Pablo Casado no estuvo fino el pasado fin de semana cuando dijo que en Valencia se había producido un aquelarre, no dijo que de brujas para no ofender a las brujas…

El arzobispo de Barcelona ha pedido perdón en nombre de la Conferencia Episcopal Española por la pedofilia, que no solo es un problema católico, sino de la Iglesia protestante que nos abochorna a todos, creyentes o no creyentes, por el que Benedicto XVI dimitió.   

La actualidad informativa es un tren permanente que no descansa nunca…

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¿Quién es... Roberto Giménez Gracia?
Roberto Giménez

Durante treinta años ha sido director del Vallés, era el segundo semanario más antiguo de Cataluña, y fue director de Honor de El Vallès del siglo XXI. Ha escrito diez volúmenes de la serie 'Casi treinta años y un día' -en Sant Jordi de 2017 se publicó el último: 'Mis Enemigos Íntimos'-. Son las memorias del director del semanario comarcal más leído en Cataluña, que desapareció seis meses después de que lo dejara. Cada Sant Jordi publica una edición de 100 ejemplares que se agotan el mismo día. ¿Por qué no hace más? "Son para mis amigos", responde. Retirado antes de tiempo, con 55 años, por culpa de una bala traidora en la médula... También se le puede seguir en Facebook -cada día laborable publica 'La libreta azul'- y en Twitter. No es el capitán Araña. Sus amigos dicen que es honesto y leal, pero eso se lo dicen porque son sus amigos. Para entrar en su cofradía exige Derecho de Admisión. Vale quien sirve, pero no sirve cualquiera.