Pensamiento

¡Houston, tenemos un conflicto!

21 junio, 2014 12:01

Del conflicto catalán y del conflicto vasco se viene hablando desde hace muchos años. Antes y después de la Guerra Civil. Franco los utilizó en su impresentable argumentario parar justificar el golpe de Estado contra la República democrática. Por eso, la palabra "conflicto" puede sonar suave o espantosa en función del escenario al que haga referencia.

El conflicto existía antes y continuará existiendo después del 9N, haya o no haya consulta, gane o pierda la opción independentista

Cuando el presidente de la Generalidad, Artur Mas, dice que, si el 9 de noviembre el Gobierno español autoriza la celebración de una consulta sobre la independencia de Cataluña, no habrá conflicto y que, si no lo autoriza, sí que lo habrá, comete una imprecisión histórica. El conflicto existía antes y continuará existiendo después del 9N, haya o no haya consulta, gane o pierda la opción independentista.

Que en las últimas elecciones en Quebec ganasen los federalistas de calle, no quiere decir que la pulsión independentista haya desaparecido de un día para otro. El profesor de la Universidad de Otawa André Lecours, director de la asociación L'idée fédérale, con sede en Montreal, afirma que "Canadá siempre experimentará tensiones". Es decir, que el conflicto durará. De hecho, Lecours calcula en un 30% los quebequeses que, hoy por hoy, son partidarios de la independencia de la provincia.

Se supone que Artur Mas quería decir que el conflicto puede ir a peor. Añadió que hará lo posible para que no se descontrole pero que, si eso pasa, será culpa del Gobierno español. ¿Se descontrolará el conflicto? ¿Habrá que rebautizarlo? En lugar de conflicto ¿tendremos que buscar otro término que defina mejor lo que pase? ¿Un "conflictazo"?

A mi hijo le entra la risa cuando ve la cuenta atrás de los días que faltan para el 9 de noviembre en la pantalla de El Punt Avui TV. No creo que todos podamos tomárnoslo del mismo modo.

¡Houston, tenemos un problema!